El PSC, al borde de la ruptura

Navarro advierte a los críticos de que un partido puede ser plural, pero “no se puede desfigurar el proyecto”

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Los consejeros nacionales del PSC están a punto de votar la resolución que ha elaborado la dirección y que deja claro que el partido no secundará ninguna propuesta sobre el derecho a decidir que no tenga el acuerdo previo con el Gobierno central.

Pere Navarro, el primer secretario de los socialistas catalanes ha defendido la posición de la dirección con convicción, y asumiendo el riesgo que corre. “El partido es plural, pero no puede haber un ruido permanente que desfigure el proyecto”, ha asegurado. Navarro ha insistido. “Hoy decidimos si tenemos un proyecto autónomo o nos supeditamos a una estrategia que es un callejón sin salida», en referencia al proyecto soberanista del President Artur Mas y que secunda Esquerra Republicana.

Sin acuerdo posible

El consejo nacional ha retrasado su inicio. La dirección ha tratado de negociar con el sector crítico, representado por dos colectivos, Agrupació Socialista, y Avancem, que lideran Àngel Ros y Joan Ignasi Elena respectivamente. Pero no ha habido acuerdo, por lo que la ruptura del PSC comienza a ser posible.

El sector crítico ha presentado una resolución propia, que quiere que se someta al voto secreto. En estos momentos no está claro si los consejeros nacionales del partido podrán votar o no las dos resoluciones. La propuesta de los críticos debe tener el aval de 47 consejeros, como ha recordado el presidente del consejo nacional, Celestino Corbacho.

La idea de Navarro es que lo que salga este domingo del consejo nacional debe ser respetado por todos. Y es que el PSC no votará a favor del derecho a decidir, sin acuerdo previo con el Gobierno central, ya sea en el Congreso o en el Parlament. Navarro ha recordado, además, que “la consulta no se hará, y lo ha admitido el propio Mas, al decir que no la convocará si no es legal”.

Al grupo mixto

La tensión es enorme. Si el sector crítico rompe, de nuevo, la disciplina de voto en el Parlament –el próximo día 20 se somete una resolución de CiU, ERC, ICV, y CUP para trasladar el derecho a decidir al Congreso reclamando que se transfiera la potestad a partir del artículo 150.2 de la Constitución— Navarro pedirá a la Mesa de la cámara catalana que los diputados díscolos se vayan al grupo mixto.

El PSC puede romperse. Esta vez la amenaza es real.

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