El PP ignora a Vox y resucita la vía de Cs en Andalucía pese a los sondeos: «Si no, en solitario»
El coordinador general, Elías Bendodo, evita mencionar a Macarena Olona: "A las elecciones hay que saber y querer presentarse".
El coordinador general del PP nacional y director de la campaña en Andalucía, Elías Bendodo, no ha mostrado ni un ápice de duda este lunes en su rueda de prensa tras el comité de dirección de Alberto Núñez Feijóo y los suyos: el partido no tiene en cuenta las aspiraciones de Vox y en las próximas elecciones andaluzas, de pactar, lo harán con Ciudadanos para rememorar «el Gobierno del cambio».
La gran prueba de fuego andaluza, donde el PP tiene opciones, a la vista de los últimos barómetros -especialmente el de este mismo lunes del Centro de Estudios Andaluces (Centra) realizado en mayo con motivo de los comicios, conocido como el CIS andaluz– de acariciar una mayoría absoluta y de repetir un fenómeno como el de Isabel Díaz Ayuso en Madrid, copa las conversaciones de propios y ajenos, en Génova y fuera. Pero, de Vox, ni palabra.
«Hay que saber presentarse a las elecciones y querer presentarse», ha dejado caer en Bendodo, en una referencia velada a la candidata de la extrema derecha, Macarena Olona, a pesar de haberse afanado en indicar que el comentario «puede afectar a uno o varios candidatos». «Cuando se presenta uno, lo hace con la vocación clara de ganar y gobernar en solitario. Nosotros aspiramos a una mayoría suficiente amplia que dé tranquilidad en los andaluces«, ha repetido el coordinador general y número 3 del PP.
Con Cs pese a su descomposición
La fórmula mágica, de no conseguir la mayoría absoluta, pasa por repetir la vía actual, a ojos de Bendodo. «El gobierno del cambio en Andalucía ha funcionado. Es el único que se ha mantenido una vez se convocaron elecciones y se disolvió el Parlamento. Es un pacto bien avenido. Si pudiéramos repetir el pacto, bienvenido sea. Si no, en solitario».
Todo ello, claro, con la obviedad del PP de la circunstancia en la que se encuentra el partido naranja, en plena tendencia de descomposición. Los mejores augurios les proyectan un puñado de diputados. Según el sondeo del Centra, Ciudadanos obtendría entre uno y dos, lo que le impediría incluso formar grupo parlamentario. Ahora tiene 21 escaños.
A eso hay que sumarle una nueva incógnita a la ecuación: Vox ha advertido este lunes al PP que podría votar en contra de la investidura de Juanma Moreno si se niega a que ellos entren en el gobierno tras las elecciones autonómicas del próximo 19 de junio. Ya han insistido por activa y por pasiva. Sus votos no son «gratis», «nunca, ni siquiera la abstención», ha zanjado el portavoz del partido de extrema derecha, Jorge Buxadé.
Viento de cara para el PP
El panorama que dibuja el CIS andaluz es de viento de cara para los populares. El PP obtendría entre 47 y 49 escaños, lo que le dejaría a seis de la mayoría absoluta en las elecciones andaluzas del 19 de junio, mientras que Vox doblaría escaños, hasta los 21 y 23 diputados, y la izquierda se quedaría lejos de los populares con los 32 del PSOE-A, los 5 de Por Andalucía (Podemos-IU) y el escaño que conseguiría Adelante Andalucía.
Juanma Moreno conseguiría el 39,2 por ciento de los votos, casi el doble de lo cosechado en las elecciones de 2018; mientras que el PSOE-A de Juan Espadas bajaría al 24,2 por ciento (-3,7); Vox tendría el 17,3 por ciento (+6,3); Por Andalucía tendría el 6,6 por ciento; Ciudadanos se desplomaría hasta el 4,8 por ciento (-13,5); y Adelante un 3,6 por ciento.
Para Bendodo esto no es eximente de nada. «Son días de encuestas», ha insistido ante las preguntas de los periodistas. «Sólo deben servir de acicate para servir trabajando. Nada está ganado. Las urnas aún no se han puesto. Una encuesta es un PCR de este momento, no del día antes ni después. Está todo el partido por jugarse y no hay que tener confianza ninguna».
No es el único tema que ha tratado el número 3 del PP nacional. También le ha dado el portazo final a la era Casado mostrándose tajante con el mantenimiento de la sede de Génova 13: «Los edificios no tienen culpa de nada y Génova es propiedad de los afiliados. La intención es seguir aquí, en este edificio».