El PP exige a Sánchez el relevo de Dolores Delgado para negociar la reforma del CGPJ
El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, da por hecho que los socialistas aceptarán dejar fuera de las negociaciones a Podemos
El Partido Popular ha exigido la destitución de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, como condición para negociar con el Partido Socialista la reforma de los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva bloqueada desde que el organismo finalizó su mandato en el año 2018.
El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, ha explicado este lunes que se trata de una de los requisitos que ha puesto sobre la mesa para tratar de desbloquear la negociación, que implica un amplio consenso parlamentario porque es necesaria una mayoría de tres quintos en el Congreso.
«Hay que seguir profundizando. Desde el PP somos gente coherente y, cuando se aceptan las condiciones y se beneficia al conjunto de la ciudadanía, no tenemos ningún problema en seguir adelante», ha expresado el diputado popular en una entrevista en la Cadena Cope.
El nombramiento de Dolores Delgado ha estado rodeado de polémica desde que tomó posesión a principios de legislatura. La oposición cargó entonces con fuerza contra Pedro Sánchez por colocar en la institución a la que fuera ministra de Justicia durante los meses precedentes. El bloque de la derecha acusó al presidente de intentar politizar el ministerio público.
El Partido Popular llegó incluso a llevar el nombramiento ante los tribunales, al considerar que la designación no estaba legitimada y que podría condicionar el transcurso de los juicios que afectan a su partido. Sin embargo, el Tribunal Supremo ha decidido aplazar su decisión por el momento.
El PP da por hecho que ha dejado a Podemos fuera de juego
No es la única condición que los populares han puesto por delante para intentar fraguar la renovación de la cúpula del órgano de gobierno de los jueces. Otro de los requisitos pasa por vetar la participación de Unidas Podemos en la designación de los nuevos magistrados que dirigirán el organismo.
García Egea ha dado por hecho que Pedro Sánchez ha aceptado esta imposición que impediría a sus socios de gobierno tener voz ni voto en la renovación. «El PSOE está aceptando la primera de nuestras condiciones», ha señalado el secretario general del Partido Popular.
La suma de los escaños del grupo socialista y el popular alcanza los 208 diputados, lo que les sitúa a tan solo dos votos de obtener la mayoría de las tres quintas partes del hemiciclo. El apoyo externo de otra formación minoritaria ya les valdría para ratificar la renovación del Poder Judicial sin los apoyos de Pablo Iglesias.
«Podemos no va a tener personas en esta renovación», ha remarcado García Egea.
PSOE y Podemos han ido de la mano para reformar los nombramientos
Si finalmente el Partido Socialista acepta dejar fuera de la negociación a Unidas Podemos, se romperá un bloque de unidad que les ha permitido batallar juntos en los últimos meses. Los dos grupos parlamentarios han llevado al Congreso una reforma para tratar de impedir que los vocales del Consejo General del Poder Judicial pudieran realizar nombramientos de jueces en tribunales clave, mientras trabajen en funciones.
El movimiento quería poner freno a las actuaciones de la cúpula dirigida por Carlos Lesmes, a la par que añadir un punto de presión al Partido Popular para que cediese a desbloquear las negociaciones. Pablo Casado y Pedro Sánchez ya alcanzaron un principio de acuerdo en el verano, pero los populares se echaron atrás como respuesta a los ataques de Unidas Podemos contra la Monarquía.
Una nueva llamada telefónica entre los dos líderes políticos reactivó las conversaciones la semana pasada. Ahora, queda por ver la posición pública que adopta Pedro Sánchez que todavía no ha aclarado si dejará fuera de juego a sus socios de la coalición o si cederá con la destitución de Delgado.