El PNV manda un mensaje a Sanchez: ya prepara las elecciones
Los nacionalistas vascos, que apoyaron la moción de censura de Sánchez, activan su mecanismo de elección de candidaturas para unas generales en marzo
«Cobra fuerza la opción de que las elecciones generales se adelanten a marzo». El PNV avisa a Pedro Sánchez que da la vuelta el reloj de arena para unos comicios que, a su juicio, no serán en mayo. Los nacionalistas vascos, socios en la moción de censura que llevó al socialista a la presidencia del Gobierno, apuestan por activar su mecanismo de elección de candidaturas, convencidos del adelanto de las generales.
El responsable de política institucional del PNV, Koldo Mediavilla, confirma los preparativos para las elecciones en una entrada en su blog en la que asegura que «nadie duda ya de que habrá adelanto electoral en España» y que solo falta por saber «cuándo hará Sánchez uso del botón ‘nuclear’ para dar por finalizada la legislatura». «Pedro Sánchez sabe que su tiempo se acaba», afirmó.
«Su equipo, que en un primer momento le rentó popularidad, le hace perder credibilidad a borbotones», escribió Mediavilla, haciendo referencia a la sanción de 30.000 euros que impuso la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) al ministro de Exteriores, Josep Borrell, por el uso de información privilegiada en la venta de las acciones de Abengoa.
«Lo último de Borrell no tiene un pase y, si no fuera por lo transitorio del momento, el canciller de exteriores estaría ya en su casa», expresó. «La alternativa del ‘superdomingo de mayo’, que tanto gusta al aparatero Ábalos, parece descartarse, no porque moleste a las baronías socialistas, porque Sánchez se ríe de ellas», agregó.
El PNV ve imposible el «superdomingo» electoral de Sánchez
El PNV dilucida las razones por las que no ve posible un «superdomingo» electoral en mayo que una las elecciones generales con las municipales, las autonómicas y las europeas. «Tiene muchos inconvenientes. El primero y fundamental es que poner cinco urnas en los colegios para votar con otras tantas papeletas diferentes podría ser un caos organizativo», manifestó Mediavilla.
Es «una apuesta política demasiado arriesgada, como jugar a la ruleta el todo o nada», comentó. «Por eso cobra fuerza la opción de que las elecciones generales se adelanten a marzo», por lo que «los jeltzales deberán activar su mecanismo de elección de candidaturas», ya que «su procedimiento asambleario exige tiempo, y este parece haberse acabado de repente».
En ese sentido, Mediavilla cree que las elecciones andaluzas de este domingo convierten el sur español «en un blanco de pruebas» previo a las generales, con la posibilidad de terminar en «un nuevo dibujo político de difícil gobernabilidad en el que no se descarta nada, ni tan siquiera la baza de una repetición electoral a modo plebiscito».