El legado de Botella: el balneario portugués, siete muertos y Gowex
Sáenz de Santamaría gana enteros como alcaldable en Madrid tras la renuncia de la mujer de Aznar y los problemas judiciales de Aguirre; Rajoy decidirá en enero los candidatos al ayuntamiento y la comunidad
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, claudica y deja vía libre para que Mariano Rajoy elija, con toda probabilidad, a Soraya Sáenz de Santamaría como candidata para las elecciones municipales del próximo mayo. El rajoynismo vence al aznarismo por la vía de los hechos. La mujer del ex presidente del Gobierno acumula un astronómico 80% de rechazo en las encuestas de opinión. En la política moderna española aún no se había dado semejante oposición demoscópica ni se tiene constancia de nadie con la capacidad para dar la vuelta a los resultados desde niveles así.
Antes de la eclosión del fenómeno Podemos –cuyas expectativas en la Comunidad de Madrid y el ayuntamiento de la capital crecen gracias a la anemia del cartel electoral popular–, Botella se había granjeado el actual fracaso en un mandato que empezó con cinco muertos en la avalancha de la fiesta del Madrid-Arena y termina salpicado por el escándalo financiero Gowex y el incumplimiento de su mayor promesa política. Cuando la futura ex alcaldesa estrenó despacho en el palacio de Cibeles prometió enjugar la mitad de la deuda que su antecesor, el hoy ministro Alberto Ruiz Gallardón, entregó en legado.
Más deuda que Gallardón
En el ámbito de la gestión de las finanzas públicas empezó sorprendiendo incluso a los técnicos del Banco de España. Aún se preguntan cómo logró reembolsar el 5,7% neto entre los ejercicios 2012 y 2013. No hubo ninguna maniobra contable. Pero el rumbo emprendido por los presupuestos municipales a partir de 2014 señala que el Ayuntamiento de Madrid, con la promesa de menos impuestos y más inversiones, terminará en 2016 con un desfase el 10% mayor que el de Gallardón. Dentro de dos años, la capital tendrá contraídos 7.036 millones de euros de deuda (659 más que en 2011).
Los recortes del manual ultra liberal aplicado habrían causado dos muertos adicionales a las víctimas del Madrid-Arena, según denuncia la oposición. Dos ciudadanos han fallecido aplastados por árboles en mal estado en el Retiro debido a la reducción de las contratas. Desde un punto de vista menos dramático, la ciudad está más sucia que nunca y sus servicios de transporte desesperan a los vecinos debido a las holgadas frecuencias de espera en las paradas de metro y bus. La reducción en estos servicios se tomó de común acuerdo con el gobierno autonómico.
Precisamente los líos con la justicia de la ex presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, dan más empuje a las aspiraciones de Rajoy. La lideresa quedaría al margen de la carrera electoral si la fuga que protagonizó en plena Gran Vía cobra categoría definitiva de delito.
Balneario en Portugal
Botella finiquitó sus opciones políticas el primer fin de semana de noviembre de 2012. Dos noches antes, la verbena del día de Todos los Santos, se producía la catástrofe del Madrid-Arena. El sábado por la mañana la alcaldesa decidió desestresarse en un lujoso balneario portugués, al sur de Lisboa. Descansó allí mientras dos jóvenes fallecían como consecuencia de las heridas de la catástrofe. La noticia exclusiva de Economía Digital conmocionó a una sociedad que repudió la actitud de su primera representante. El vicealcalde dimitió pocos días después y la instrucción judicial terminó la semana pasada con el jefe de la policía municipal sentado en el banquillo de los acusados.
El expediente de la probablemente peor titular de la alcadía de Madrid en tiempos se completa, por ahora, con la firma del dueño de Gowex, Jenaro García. Según la investigación periodística también de este diario, Botella habría beneficiado directamente a la empresa frustrada de wifi con adjudicaciones y favores financieros. La alcaldesa, el confeso falsificador de cuentas y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) protagonizaron un triángulo que, en los últimos cinco años, habría sido fundamental para explicar por qué el consistorio de la capital apalancó la expansión de la ingeniería que ha engañado a los mercados.
Muchos, sin embargo, recordarán a Botella por la anécdota del «relaxing cup of café con leche«.