El guiño a los presos: Sánchez discute el delito de rebelión
El presidente del Gobierno subraya que el delito de rebelión "se tiene que dar por militares o por civiles armados a la orden de militares"
A pocos días de que el Tribunal Supremo dicte el auto de apertura de juicio oral por la causa del 1-O, Pedro Sánchez sugiere que el delito de rebelión no es aplicable a la organización del referéndum ilegal del 1 de octubre.
El presidente del Gobierno hace así el guiño reclamado, una y otra vez, por los partidos independentistas y por su principal socio de gobierno, el líder de Podemos, Pablo Iglesias. Los políticos presos catalanes han insistido en algún gesto por parte del Gobierno en el marco de la negociación de los presupuestos.
Incluso el miércoles en la mañana, antes de las reveladoras declaraciones de Sánchez en el Congreso de los Diputados, el republicano Joan Tardà recordó que “no hace falta que nos llamen” para apoyar los presupuestos generales del Estado “si no hacen lo que les hemos reclamado”. En el mismo pleno, Pablo Casado acusó al presidente de ser «partícipe y responsable del golpe de Estado que se está perpetrando ahora mismo en España».
Sánchez: «El procés fue pacífico»
Sánchez respondió de forma indirecta al portavoz del PP y de forma directa a Aitor Esteban, del PNV, que aseguró que «el procés fue pacífico a pesar de que algunos habrían querido otra cosa». El socialista se suscribió a esta tesis y demostró, a su vez, que su lectura del delito más grave por el que están imputados los independentistas catalanes dista mucho de la del juez Pablo Llarena.
«En 1994, el señor Trillo, entonces diputado, hizo una propuesta de modificación en la que decía que el delito de rebelión, que es inherente a un supuesto golpe de Estado, se tiene que dar por militares o por civiles armados a la orden de militares», manifestó Sánchez, recordando al ministro de Defensa de Aznar, Federico Trillo, y criticando a Casado por irse más a la derecha de lo que su propio partido ha promulgado en el pasado.
El Pdecat celebra el aliento de Sánchez
La señal de Sánchez ya hace eco en el independentismo. Mientras en ERC se mantienen prudentes, a la espera de saber si la frase del miércoles es el comienzo de una deriva de gestos del presidente, en el Pdecat muestra satisfacción con un gesto que ven significativo en fondo y forma, informó La Vanguardia. Además, alimentó el rumor de que la Abogacía del Estado sopesa descartar el delito de rebelión.
El separatismo pretende que se libre a los políticos presos de toda culpa, por lo que cualquier gesto que no escale hasta ese nivel le parecerá insuficiente, pero está a la expectativa de las maniobras del Gobierno. Además, valora positivamente que Sánchez dijera que Esteban hizo una «reflexión muy acertada» tras afirmar el dirigente vasco que lo que pasa en Cataluña es «una crisis constitucional» y no un «golpe de Estado».