El Gobierno se resiste a aprobar medidas económicas anti-coronavirus
Pedro Sánchez anuncia un plan de choque inminente sin anticipar ni el calendario ni las iniciativas que incluirá
Hace una eternidad, el pasado jueves, el Gobierno anunció que solo pensaba aprobar un paquete de estímulos económicos en el caso de que «la epidemia de coronavirus se prolongue en los próximos meses y su impacto sea más alto». Cuatro días después, y a la vista de los daños que la pandemia está generando en la economía española, el Gobierno ha comenzado a variar su discurso. Ya admite, a diferencia de la pasada semana, que los perjuicios se están notando y que van a ser necesarias adoptar medidas de choque, aunque no concretó ninguna.
De hecho, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, trató de edulcorar la situación y dijo que «empiezan a verse situaciones de daños económicos». Calvo dijo, por ejemplo, que el sector turístico —fundamental en la economía nacional— «puede verse afectado», aunque, en realidad, la afectación ya se ha producido con una caída imparable de las reservas.
Pese al contundente impacto que la pandemia está provocando en todo tipo de industrias, la vicepresidenta del Gobierno quiso calmar los ánimos al subrayar que la economía española «funciona», que está creciendo por encima de la media y que, por tanto, no es momento de pronosticar si hay que revisar a la baja las previsiones macroeconómicas de la administración. En todo caso, se limitó nuevamente a hablar de una posible afectación, aunque organismos como la OCDE han sido bastante más explícitos: la economía mundial caerá un 0,5%.
Horas después, y ante la presión creciente de agentes económicos y sociales, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció un plan de choque económico inminente, aunque tampoco anticipó ningún tipo de medida. Simplemente dijo que se darán a conocer «cuanto antes» y que se realizarán de forma consensuada.
La gestión del Gobierno
El Gobierno, entretanto, sigue con su estrategia de la semana pasada, consistente en concentrar el foco de la crisis en el ámbito sanitario y en descargar el grueso de las explicaciones ante la opinión pública en en el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y en el omnipresente director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
Sánchez, encabeza este lunes la comisión de seguimiento del coronavirus en el Ministerio de Sanidad, mientras que Salvador Illa tiene previsto reunirse este martes con los consejeros autonómicos de su ramo.
No será hasta el miércoles cuando el Gobierno convoque la comisión interministerial creada para abordar el coronavirus, la cual implica a 14 departamentos bajo la tutela de la vicepresidenta Calvo. La mencionada comisión tan solo se ha reunido en una ocasión y apenas ha tomado medidas porque Sánchez ha ordenado que sea Sanidad quien marque el paso.
En realidad, subyace un problema jerárquico en la comisión interministerial, puesto que hay pugnas internas entre los ministerios del PSOE y de Podemos para afrontar la crisis, tal y como se vio la pasada semana cuando el departamento de Trabajo (Yolanda Díaz, Podemos) publicó una guía de actuación laboral en contra del criterio del resto del ejecutivo.