El Gobierno se aferra a la Constitución para eludir la propuesta de Casado sobre el CGPJ
La ministra portavoz, Isabel Rodríguez, tensa la cuerda con el Partido Popular: "No hay excusas para incumplir el mandato constitucional"
La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros celebrada este martes en Moncloa . EFE/Javier Lizón
El Gobierno de Pedro Sánchez no está dispuesto a ceder ante las reivindicaciones de Pablo Casado para facilitar la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). La última tentativa del líder de la oposición se ha saldado con un nuevo cruce de acusaciones que ha embarrado cualquier posibilidad de dar relevo al órgano de dirección de los jueces.
El líder del PP se ha mostrado dispuesto a reunirse de inmediato con el presidente, pero solo si acepta reformar el sistema de elección del CGPJ para que 12 de los 20 vocales sean elegidos directamente por los propios magistrados. Sin embargo, el Gobierno se aferra al sistema establecido en la Constitución, que deja esa responsabilidad en el Congreso mediante una mayoría de tres quintas partes.
«No hay excusas para incumplir el mandato constitucional», ha contestado la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, quien ha evitado contestar de forma directa a la propuesta tras la última reunión del Consejo de Ministros.
La ministra socialista se ha escudado en «la importancia de cumplir con el marco constitucional» para dar un portazo a Casado, al que ha acusado directamente del bloqueo de las instituciones que también se extiende sobre otros órganos como el Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo o el Tribunal de Cuentas que también precisan amplios consensos con la oposición.
«Solo hay en estos momentos un partido que está bloqueando esas mayorías cualificadas», ha respondido.
Rodríguez descarta una llamada de Sánchez para encauzar las negociaciones
La ministra portavoz ha descartado además que vaya a producirse un nuevo acercamiento personal por parte del presidente del Gobierno, que ya llegó a un acuerdo telefónico con Casado en el verano de 2020, antes de que las negociaciones volvieran a saltar por los aires. «Nadie tiene que llamar a ningún español para cumplir la Constitución«, ha zanjado.
Los encontronazos entre los dos principales partidos del arco parlamentario se producen justo después del arranque del curso judicial, en el que las cabezas visibles de la judicatura coincidieron en reclamar a las dos formaciones que pongan fin a sus diferencias para pactar definitivamente el desbloqueo de los órganos judiciales.
Precisamente, Rodríguez ha evitado valorar el discurso del presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, que pidió un ejercicio de «patriotismo» para desatascar la situación. La ministra portavoz ha subrayado que el magistrado está en calidad de emitir «sus opiniones» pero se ha mostrado neutral: «El Gobierno acata y respeta al Poder Judicial».
Las negociaciones entre socialistas y populares han fracasado hasta en tres ocasiones desde que el Poder Judicial finalizó su mandato en 2018. Las filtraciones, el papel de Podemos o la elección de los candidatos han impedido el acuerdo, que ahora continúa enquistado por la propuesta de incluir a los jueces como parte activa en el proceso de elección.
