El Gobierno prevé aprobar la reforma laboral en el Congreso el 3 de febrero pese a las reticencias de ERC

El ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ya ha puesto fecha a la aprobación de la reforma laboral en el Congreso de los Diputados. Una vez que Gobierno y agentes sociales ya han llegado a un acuerdo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez da por hecho que el próximo 3 de febrero “se va a convalidar” en la Cámara Baja este el real decreto ley.

Así lo ha asegurado el ministro en una entrevista en Servimedia en la que no ha tenido en cuenta las reticencias de uno de sus principales socios parlamentarios: ERC. Su portavoz, Gabriel Rufián, ha advertido este miércoles en Cadena Ser que su grupo «no dará un cheque en blanco» al Gobierno de coalición en la nueva reforma laboral, y ha añadido que aunque desea negociarla, «el acuerdo aún está bastante lejos».

Pero Bolaños está convencido de que la convalidación saldrá adelante y ha descartado la posibilidad de tramitar el decreto en el Congreso como proyecto de ley porque “no es una norma al uso del Gobierno, que luego se lleva a tramitación para mejorarla, sino que viene de un acuerdo social, de tal manera que esa tramitación parlamentaria podría hacer alguna enmienda que desequilibrara el texto” consensuado con los agentes sociales.

“La reforma laboral que hemos aprobado deriva de un acuerdo entre patronal y sindicatos, con equilibrios” y “esa tramitación parlamentaria podría hacer alguna enmienda que desequilibrara el texto”, afirmó el ministro de Presidencia en declaraciones a la citada agencia.

«Se tiene que aprobar el texto tal y como se ha aprobado por los agentes sociales, porque es la manera de respetar el diálogo social»

“Por eso, creemos que no es necesario hacer ninguna tramitación parlamentaria”, sino que “se tiene que aprobar el texto tal y como se ha aprobado por los agentes sociales, porque es la manera de respetar el diálogo social y de respetar los equilibrios que han dado lugar al acuerdo entre sindicatos y patronal”.

Bolaños cree que hay tiempo para conseguir el apoyo de sus socios

Bolaños considera que todavía hay tiempo por delante para conseguir el apoyo de ERC y ha aprovechado para lanzarles un mensaje: “Votar que no es cronificar la precariedad y la temporalidad; es facilitar despidos, cuando hay problemas económicos en las empresas”.

En este sentido, ha recordado a su socio que votaría en la misma línea del PP. “Nos parece muy difícil que se pueda votar en contra de esta reforma laboral, es muy complicado poder explicar a los trabajadores que sigues perjudicándoles con la medida impuesta, desequilibrada que implantó el PP en 2012 cuando gobernaba», ha puntualizado.

Para garantizar el apoyo de sus socios parlamentarios, Bolaños mantendrá contactos “discretos”, con ERC, PNV o Bildu, sus socios preferentes. El objetivo es “intentar atraerlos a un acuerdo que es bueno para el país y que es un acuerdo que nos ha pedido y que está pidiéndonos la Comisión Europea», ha afirmado.

Yolanda Díaz enfría la posibilidad de un acuerdo con Cs

Respecto al posible apoyo de Ciudadanos a la reforma laboral, Bolaños ha valorado “positivamente” que cualquier fuerza política se muestre favorable. «Eso es lo tiene que hacer cualquier grupo político que quiera el bien y el bienestar de los trabajadores y de los empresarios, que quiera una reforma como ésta, que es una reforma que nos pide Europa y que es positiva. Ojalá haya más partidos y más fuerzas políticas que acaben apoyando iniciativas del Gobierno”, ha apuntado.

No obstante, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha alejado este miércoles en cierta medida las expectativas sobre un posible acuerdo con Ciudadanos sobre la reforma laboral en su tramitación en el Congreso, a no ser que rectifique y acometa un cambio en su posición.

Así lo ha expresado la vicepresidenta después de que la presidenta de la ‘formación naranja’, Inés Arrimadas, tendiese ayer la mano al Gobierno para aprobar la reforma laboral sin ERC y Bildu, al calificar de “bluf’ la norma pactada respecto a las propuestas iniciales.