El engaño de Iglesias: niega vínculos con ‘La Última Hora’ pero Podemos lo envía a sus bases para atacar a otros medios
Podemos utiliza los artículos de 'La Última Hora' contra periodistas como herramienta de propaganda para agitar a sus afiliados
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, siempre está dispuesto a compartir alguna de sus críticas sobre el sistema de medios de comunicación en España. Sea porque no está conforme con las pocas y grandes empresas que hay detrás de ellos, sea porque no observa suficientes medios de izquierdas. Tiene poco que decir, en cambio, respecto al diario digital de su cuerda La Última Hora (LUH) porque, subraya, no pertenece a Podemos. Pero lo cierto es que actúa como tal.
Economía Digital ha podido comprobar que LUH no solo sigue a pies juntillas la obsesión de Iglesias con señalar a los medios con los que no comulga, sino que Podemos usa los artículos de este digital para enviarlos a sus bases de afiliados y jalear la cruzada contra las publicaciones que no son de su gusto como Ok Diario.
Pese a las evidencias, a Iglesias le incomoda que los periodistas le pregunten por La Última Hora, el medio dirigido por su antigua asesora en el Europarlamento Dina Bousselham, e intenta quitarse de encima a quienes lo intentan.
—»¿Cuál es la relación de Unidas Podemos con La Última Hora?», le preguntaron al vicepresidente segundo del Gobierno en una reciente entrevista de eldiario.es e Infolibre.
E Iglesias se revolvió sin entrar en detalles: «¿Cuál es la relación del PSOE con elplural.com? ¿Cuál es la relación del PNV con el Deia? ¿Cuál es la relación del PP con La Razón?»
Desde que Bousselham fue designada directora de LUH el pasado mes de mayo, la publicación se ha caracterizado por atacar a medios y periodistas en artículos que no llevan firma. El Mundo, Ok Diario y El Confidencial han sido tres de los más señalados y a los tres los identifica como «medios que colaboraron con las cloacas».
Para esta cruzada, La Última Hora ha contado en todo momento con el apoyo activo de los dirigentes de Podemos, que no solo difunden permanentemente sus contenidos a través de sus redes sociales, sino que también reclaman dinero para la financiación de este proyecto propagandístico.
Iglesias no solo legitima los continuos ataques a los medios, sino que se dedica a difundir doctrina respecto a un sistema mediático que, en su opinión, no representa ningún contrapoder respecto al Gobierno.
«Si en la estructura de propiedad de un medio están los bancos, las IBEX o los fondos como Black Rock… de contrapoder nada, son los brazos mediáticos del poder», considera el vicepresidente del Gobierno, crítico con que «el peso de la derecha en los medios sea infinitamente más que lo que la gente vota». «¿Esto es bueno para una sociedad democrática?», se pregunta.
Esta es la pregunta que Iglesias dejó en el aire en la entrevista referida y estos son algunos de los titulares que uno puede leer en LUH: «El chollo de El Mundo en TVE: dinero público y tertulianos a diario»; «Los medios que colaboraron con las cloacas señalan a LÚH y defienden a Inda«; «Lo de Esteban Urreiztieta es de las mejores basuras periodísticas que he leído jamás»; «Joaquín Manso, director adjunto de El Mundo, borra miles de tuits».
Tanto periodistas como medios son señalados a diario en LUH, pero Iglesias no ve ahí motivos para la crítica. Sí al contrario: «Ya está bien de hipocresía y ya está bien de que los medios de comunicación de derechas señalen a periodistas por ser de izquierdas».
«Los medios son armas que valen la pena disparar»
Lo cierto es que a lo largo de los años Iglesias ha dejado sobradas muestras de la misión que atribuye a los medios en el combate político. Quizá nunca con tanta contundencia como en una entrevista de 2013 en Galizaanocero.tv, donde definió a los medios como “un arma que vale para disparar”.
Y en eso está en La Última Hora, en disparar. Tal y como Iglesias querría, pero sin que el vicepresidente segundo se muestre como quien empuña el arma.