El conseller Vila lo tiene claro: mejor agotar la legislatura
Asegura que "no se puede dejar la agenda del país en quien lo fía todo al futuro" en alusión a Esquerra
El conseller de Territori, Santi Vila, se expresa con facilidad. Tiene las cosas claras, pero es consciente de la complicada situación en la que se encuentra el Govern de la Generalitat. Vila, que apuesta por dar una salida al problema catalán, que para él se centra en la petición de una consulta de verdad, «que permita expresarse», considera, sin embargo, que la prioridad del Ejecutivo de Artur Mas debería ser acabar la legislatura, y seguir gobernando.
«Mas no sé si será el presidente de la independencia, pero sé seguro que será el President que ha evitado el colapso de Cataluña», ha asegurado en un desayuno informativo. La idea de Vila es que, poco a poco, se ha ido superando una situación de parálisis, que se podría ilustrar con la Línea 9 del Metro. En 2012 estaba parada, «ahora se podrá poner en marcha», ha afirmado.
No todo se arregla con la independencia
Pero en ese intento de acabar la legislatura hay otros factores. Vila entiende que «no se puede dejar la agenda política en quien lo fía todo al futuro», en una alusión directa a Esquerra Republicana, y a su idea de que todo se arreglará con la independencia, situando un horizonte que nadie sabe cómo se podría concretar.
Con Vila, en el desayuno organizado por el fòrum Nueva Economía, sólo estaban los consellers Andreu Mas-Colell, y Germa Gordó, flanqueados por los dos hombres fuertes de Convergència, Josep Rull y Jordi Turull, coordinador general y presidente del grupo parlamentario, respectivamente.
El conseller Vila ha contado con la presentación por parte de David Madí, que ha destacado de él, precisamente, su criterio personal, y la dificultad de encuadrarlo en una posición fija, disciplinada dentro de un partido político.
Reacción ante los recortes sociales
Vila ha indicado que el soberanismo se debe explicar como una reacción de la sociedad catalana con el objeto de ilusionarse, de encontrar sentido a un futuro, en una situación económicamente muy complicada. Y ha explicado que con un recorte del presupuesto desde 2010 del 22%, lo que ha supuesto 6.000 millones menos, la sociedad catalana adoptó el proyecto soberanista como un proyecto de futuro, «ilusionante».
Pero finalizar la legislatura sólo depende en estos momentos del President Mas, que este mismo miércoles se ha reunido ya con el presidente de Esquerra, Oriol Junqueras.