Santi Vila carga contra Òmnium por el boicot a la banca
Vila reprocha a Crida per la democràcia, impulsada por Òmnium, que llame a sacar dinero de los bancos para demostrar el poder independentista
El Govern que preside Carles Puigdemont está dividido por una posible declaración de independencia y por las campañas de agitación continuas de las entidades soberanistas. Ha sido el consejero de Empresa, Santi Vila, el primero en actuar al cargar con contundencia contra Òmnium Cultural por la campaña que ha iniciado este viernes en la que pide que se saque dinero de las entidades bancarias para demostrar el poder de “la gente”, el poder del movimiento soberanista.
Vila lo ha expresado con claridad: “Tensionar los bancos o dinámicas de boicot comercial no son la mejor manera de hacerse escuchar. Poner en riesgo la economía es siempre un autogol”, ha asegurado en su cuenta de Twitter.
El soberanismo quiere demostrar «el poder de la gente» con acciones directas
En esa campaña, de la Crida per la democràcia, una iniciativa que ha impulsado Òmnium Cultural, se pide que se saque una cantidad de dinero como muestra del activismo de los soberanistas. Se trata de una campaña que se difunde por Whatsapp en la que se piden “acciones directas” para demostrar, en los próximos días que el independentismo se basa en el “poder de la gente”.
Tensionar els bancs o dinàmiques de boicot comercial no són la millor manera de fer-se sentir. Posar en risc l’economia és sempre un autogol
— Santi Vila (@SantiVila) 20 de octubre de 2017
Al margen de Vila, consejero de Empresa, el resto de miembros del Govern todavía no ha reaccionado ante una campaña que, si tuviera una respuesta masiva, puede poner en riesgo la situación de las entidades bancarias. En concreto, el soberanismo ha dirigido sus miradas contra Caixabank y Banc Sabadell por haber decidido trasladar sus sedes sociales a Valencia y Alicante, respectivamente.
En cambio, quien también ha criticado la decisión de las entidades soberanistas ha sido la coordinadora general del Pdecat, Marta Pascal, al entender que no es la mejor fórmula, y que cada ciudadano debe saber qué hace con su dinero, sin indicaciones de nadie.