El ‘caso Puigdemont’ divide al Govern en un momento clave de la legislatura
La detención del ex president calienta el Debate de Política General que tendrá lugar la próxima semana en el Parlament
La detención de Carles Puigdemont por la policía italiana tensiona aún más las relaciones entre los socios del Govern a unos días de celebrarse el Debate de Política General (DPG) en el Parlament.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, fijará en este cónclave, que tendrá lugar desde el martes hasta el próximo jueves en la Cámara catalana, las líneas y estrategias de su mandato durante el próximo año.
Sus socios de Junts añadirán el ‘Caso Puigdemont’ y la mesa de diálogo como principales afrentas del Gobierno central al independentismo más radical para evitar que Aragonès siga colaborando con Pedro Sánchez.
Desde Junts siguen sin fiarse del diálogo que ofrece Moncloa. La detención de Puigdemont el jueves por la noche les pilló a todos por sorpresa. Los posconvergentes desplegaron de inmediato a sus consejeros en la concentración convocada por la ANC, mientras los republicanos optaron por un perfil bajo.
«Junts se apoyará en la CUP para enmendar a ERC»
Las diferencias de forma y fondo entre los socios independentistas podrían dañar la hoja de ruta que presentará Aragonès la semana que viene en el Parlament.
«Junts se apoyará en la CUP para enarbolar su enmienda a la estrategia negociadora de Esquerra», comentan los expertos consultados por Economía Digital. El ‘ala’ más dura del nacionalismo teme que sus votantes exijan su dimisión si no se avanza en la independencia.
Para ERC, el ‘Caso Puigdemont’ también ha supuesto un vuelco en los planes del president. Los republicanos tenían pensado dejar patente -sibilinamente- la soledad de Junts en el Debate sobre Política General. Su estrategia se centraba exhibir que Aragonès está al mando con una hoja de ruta para encarar, de paso, la negociación de los Presupuestos.
Los republicanos eran conscientes de que podrían encontrar más apoyos en el PSC y en Los Comunes que en sus actuales socios de coalición. Ello habría escenificado una foto final en la que podría empezar a esbozarse ese tripartito que tanto temen los de Carles Puigdemont. Desde el PSC reivindican que «existe una mayoría alternativa a la que gobierna actualmente Cataluña».
Pero la detención del ex president trastoca todos los planes y Aragonès vuelve a unirse a Junts para reclamar más que nunca la amnistía y la autodeterminación de Cataluña.
Este giro de guion no era el esperado por los republicanos. En estos momentos, los ánimos en ERC se concentran en rebajar el malestar con la mesa de diálogo con Junts y la CUP mientras se ponen de perfil con su apoyo al ex president.
Otro desprecio de Junts: un homenaje a Torra
Los republicanos buscan calmar los ánimos con sus socios de Govern para que el ‘Caso Puigdemont’ no se alargue en el tiempo. Sin embargo, los posconvergentes ya tenían otro ‘feo’ más preparado para sus socios de cara al Debate de Política General la próxima semana.
Junts busca eclipsar el discurso principal del presidente con un acto en homenaje al ex president Quim Torra. La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha descolocado a los republicanos llevando esta propuesta a la Junta de Portavoces.
ERC terminó aceptando el acto, a regañadientes, sin conocer por el momento ni el formato del acto, ni la hora a la que se celebrará. Se desconoce si el propio president decidirá asistir a este homenaje.
El debate de Política General en Cataluña dará comienzo el próximo martes día 28 a las 16:00 horas con la intervención del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.
El cónclave continuará el miércoles a las 9:00 horas, con las intervenciones de los grupos parlamentarios, que tendrán 30 minutos cada uno, según decidió el pasado martes la junta de portavoces en su reunión ordinaria.