El riesgo de rebrote en Cataluña alcanza los 576 puntos
El indicador que prevé el crecimiento epidemiológico de la Covid-19 se multiplica por tres en un mes y se acerca con fuerza a los 600 puntos
Cataluña tiene ahora mismo un riesgo de rebrote de coronavirus similar al registrado a mediados de octubre, cuando el indicador se instaló en una senda de crecimiento que obligó al Govern de la Generalitat a poner sobre la mesa el confinamiento total. El encierro domiciliario finalmente no sucedió porque el Gobierno central declaró un nuevo estado de alarma que no lo permitía y porque el acuerdo al que llegaron los consejeros autonómicos de Sanidad no lo contemplaba.
Este miércoles, el indicador ha alcanzado los 576 puntos (24 más que el dato del martes) y se dirige con fuerza a los 600, según elte Departamento de Salud. Este riesgo de rebrote es el más alto desde el 10 de noviembre, cuando estaba descendiendo porque ya estaban en vigor las duras restricciones en la comunidad para frenar la segunda ola de Covid-19. Ahora, más bien, la curva del riesgo de rebrote está creciendo y prevé que los contagios se sigan disparando durante las próximas dos semanas.
El indicador se ha multiplicado por tres en el último mes. El riesgo de rebrote en Cataluña al 8 de diciembre era de 174 puntos. Ahora, casi dos semanas después de Nochebuena –que supuso una relajación de las restricciones para permitir reuniones– empiezan a verse los efectos de las Navidades. La velocidad de reproducción del virus está en 1,47 puntos, lo que se aleja paulatinamente del máximo anhelado de 1, que implica que cada contagiado infecta a una persona.
El umbral de máxima alerta del riesgo de rebrote, por su parte, es de 100 puntos, por lo que la cifra actual multiplica por más de cinco ese escenario de relativa calma. Desde luego están creciendo las cifras de contagiados, hospitalizados e ingresados en UCI, y la incidencia acumulada a 14 días ha incrementado hasta los 406,88 casos por cada 100.000 habitantes, muy por encima de la incidencia deseada de 25 casos.
Este miércoles se han registrado 4.387 casos nuevos de coronavirus en las últimas 24 horas y se han sumado otras 75 muertes en Cataluña.
Hospitales al borde del colapso
«Ya hay hospitales que están bordeando el colapso», ha advertido este martes el presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, Jaume Padrós, en una entrevista con Rac1. Este médico y la organización que representa llevan desde finales de diciembre avisando de la preocupante evolución del coronavirus en Cataluña y de la probabilidad de que una tercera ola pandémica azotase a la comunidad nada más empezar 2021. El Colegio planteó hace una semana un confinamiento total.
Los hospitales prevén un nuevo pico de hospitalizaciones en las próximas semanas. Es decir, entienden que los alarmantes datos sanitarios son apenas el comienzo de una nueva pesadilla. «Ahora estamos viendo todavía un aumento gradual, porque el goteo empezó a finales de diciembre y todavía no vemos que se haya disparado, pero ya tenemos una ocupación de las UCI bastante importante», dijo al diario Ara Rocío Cebrián, subdirectora asistencial del Hospital Vall d’Hebron.
«Tenemos la mitad de la UCI ocupada por enfermos de coronavirus y a planta siguen entrando muchos enfermos; solo ayer en la noche [el lunes 4 de enero] llegaron 15», ha señalado el coordinador de Covid del Hospital Sant Pau, Pere Domingo.
Aragonès urge al Gobierno imponer el teletrabajo
En este contexto de máxima alerta por la pandemia en Cataluña, el vicepresidente del Govern en funciones de presidente, Pere Aragonès, ha demandado este miércoles al Gobierno de Pedro Sánchez que imponga la obligatoriedad del teletrabajo en toda España. En caso de no «atreverse» a dar ese paso, ha urgido a La Moncloa a transferirle las competencias. Aragonès ha señalado que esta medida debía haberse tomado «hace semanas» para lograr un porcentaje de teletrabajo del 30%.
Esta es una de las tres demandas que la Generalitat trasladará a Pedro Sánchez. Las otras dos son que los ERTE se extiendan más allá de finales de enero y sus prestaciones se abonen sin demoras, y que haya «ayudas directas» a empresas y otros colectivos perjudicados, informa Efe.