Duran Lleida culpa a Artur Mas del ahogo de Unió
El exdirigente de Unió atribuye a las campañas electorales de Mas la principal causa de la deudas que asfixiaron a su partido
Josep Antoni Duran Lleida, exlíder de Unió Democràtica y exsecretario general de Convergència i Unió (CIU), ha atribuido el ahogo financiero de su partido durante el año 2016 al gasto desmesurado que significó el encumbramiento de Artur Mas como presidente de la Generalitat.
Así lo expresa en su libro de memorias El riesgo de la verdad (Editorial Proa), en el que señala las campañas electorales como principal causante de la deuda que ahogaba a su partido. «Unió tenía una deuda exagerada. Sin duda, y me siento responsable», reconoce Duran en el libro por primera vez.
El antiguo líder democristiano sitúa en la primera precampaña de Mas —esto es en 2001, cuando fue nombrado sucesor de Jordi Pujol y candidato de CiU a la presidencia de Catalunya— el momento en el que Unió empezó a percibir su deuda crediticia. «Para situarlo como candidato de CiU, cuando se presentó por primera vez (en 2003), se gastó todo lo que no teníamos, y más.”
Duran apunta al entonces jefe de campaña de CiU, David Madí, como responsable: “Me imagino que no puso demasiados límites». Duran lamenta que la ciudadanía viva “alejada de política y de los políticos”, y que los medios de comunicación no dirijan suficiente atención hacia las cuestiones que “realmente preocupan a la ciudadanía”. Este hecho que se materializa, asegura, en “esfuerzos” para atraer a los ciudadanos, como “lápices, llaveros, abanicos, globos…” que incrementan el coste de las campañas.
«No recibimos ni un céntimo del Parlament entre 2007 y 2012»
Por otro lado, el exlíder de Unió denuncia que “de repente” su partido dejó de recibir las subvenciones del Parlament de Catalunya. Entre 2007 y 2012, asegura, no recibieron «ni un céntimo» de una suma que les correspondía, acorde con el número de escaños que ocupaban. CiU alegaba que «había hecho un crédito con La Caixa que pignoraba 14.700.000 euros de las subvenciones con un vencimiento de cinco años», sin habérselo comunicado a Unió.
El democristiano subraya que debería haber recibido cinco millones de euros durante ese período de tiempo, y que se vieron obligados a pedir un préstamo a La Caixa, conscientes de que “ la jugada” que les había hecho Convergència Democràtica de Catalunya.
Después de la ruptura con CDC en 2015, Unió perdió gran parte de sus militantes, sus cargos públicos y terminó por quedarse fuera del Parlament y del Congreso de los Diputados. El exportavoz de CiU cree que si Unió hubiera mantenido su presencia en las Cortes y sus cargos administrativos, podrían haber “corregido sus finanzas”.
La liquidación de Unió dejó a Duran «triste y llorando»
Cuando Duran perdió su escaño en el Congreso en 2015, el entonces secretario general de Unió, Ramon Espadaler le pidió ante el resto de dirigentes del partido que diera un paso atrás, algo que que sorprendió al democristiano, que se retiró en el siguiente consell nacional. Duran afirma que que la liquidación del partido fue un episodio “profundamente doloroso” y que la noticia, un año más tarde, de que los bancos consideraban más oportuno ir a concurso de acreedores y no renegociar la deuda le dejó “triste y llorando”.