Los mossos identifican a tres ciudadanos por poner el himno de España
Los Mossos d' Esquadra acusan de desórdenes públicos a los ciudadanos que han puesto a todo volumen el himno de España durante la ofrenda de la Diada
La Diada de Cataluña de este año va a dejar momentos para el recuerdo. El tradicional acto de la ofrenda en el monumento de Rafael Casanova, al que ha asistido el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha estado marcado por lo que ha sucedido en un hotel cercano, donde tres ciudadanos han puesto el himno español a todo volumen desde su habitación.
De acuerdo a la información adelantada por el diario El Mundo, la anécdota se ha saldado con la visita de los Mossos d’ Esquadra a dicho hotel, en el que han identificado a las personas responsables, que próximamente recibirán una citación judicial. La policía catalana les acusa a todos ellos de ser responsables de desórdenes públicos.
Tras lo sucedido, los miembros del Ejecutivo de Torra no han tardado en pronunciarse. La primera en hacerlo ha sido la consellera de Presidencia, Meritxell Budó, quien ha calificado este hecho de «falta de sensibilidad y de respeto hacia otras sensibilidades». Budó también ha tachado el acto de «incívico y lamentable».
Los implicados, al parecer, serían activistas de las conocidas como brigadas de limpieza. Esta organización está formada por ciudadanos contrarios al proceso de independencia de Cataluña y se han caracterizado hasta el momento por organizarse para quitar lazos amarillos de las calles de las localidades catalanas.
Gritos de «fuera España»
El acto, que se ha celebrado en el monumento de Rafael Casanova, ha marcado por la tensión. Parte del público asistente ha contestado al himno nacional con caceroladas y otros con gritos de «fuera España». Más conciliador ha estado el presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent. A preguntas de los periodistas por lo sucedido, ha respondido que no le molesta «ningún himno».
Al margen de este acto, se han producido otros de peor gusto. La organización juvenil Arran, vinculada a la CUP, ha quemado varias imágenes del Rey Felipe VI y de varios jueces, a los que considera figuras emblemáticas del «régimen del 78».