El nuevo fútbol: estadios divididos en tres zonas y hoteles búnker
La patronal del fútbol ha cerrado el protocolo para la vuelta a la competición a puerta cerrada, para lo que establece estrictas medidas
La nueva normalidad va a cambiar los procedimientos en todos los ámbitos de la sociedad. Y en el fútbol va a ser especialmente estricto, teniendo en cuenta la cantidad de gente que concentra cada semana y la exclusividad de los jugadores. Pendientes de que se concrete la reanudación de las competiciones ligueras el 12 de junio o semanas más tarde, la patronal del sector ha cerrado el protocolo de la vuelta a la competición, que será a puerta cerrada.
El documento, inspirado en el modelo seguido por la Bundesliga, presenta una batería de medidas que afectan a los equipos desde que salen del hotel hasta que vuelven tras los encuentros. Fuentes de LaLiga explican a El País que este protocolo podrá ser modificado para su mejora si así se cree necesario durante la puesta en marcha del campeonato.
Uno de los primeros cambios por la pandemia del coronavirus se va a ver en los estadios, que quedarán divididos en tres zonas: verde, azul y roja. La zona verde abarcará desde la puerta exclusiva para jugadores y cuerpo técnico hasta el campo de juego.
Allí se incluyen los vestuarios y todas sus salas. Se desinfectará 24 horas antes del partido, incluidas las porterías. Los vestuarios y sus salas anexas, una vez desinfectados, se precintarán y solo podrán acceder a ellos los miembros del equipo que lo vayan a ocupar. El banquillo se ampliará para que también entren los no convocados manteniendo las distancias de seguridad.
La zona azul es el resto del estadio (incluidos el palco, la sala de seguridad de la UCO, cabina media coach, puntos de cámaras fija, etc.). La zona roja hará referencia el exterior del estadio, donde se situarán los puntos de control para el acceso, las unidades móviles, los aparcamientos de los vehículos y autobuses, etc.
En cualquiera de las puertas se harán controles de temperatura, se llevarán guantes y mascarillas y se portará el certificado de la última prueba médica realizada 24 horas antes del encuentro con resultado negativo.
Hoteles y transporte de los jugadores
Los hoteles estarán bunkerizados y desinfectados, mientras que los desayunos, comidas y cenas se prepararán en recipientes individuales y se distribuirán en bolsas también individuales. Podrán consumirse en el comedor, manteniendo las distancias de seguridad de dos metros entre ellos. El tiempo que los jugadores no estén entrenando, deberán pasarlo en las habitaciones, donde habrá una caja de guantes y mascarillas. En las salas de fisioterapia solo se podrá atender a un jugador.
Los desplazamientos para los partidos serán en tren, avión o autobús. Los autobuses tendrán que ser desinfectados, y serán siempre los mismos, así como los conductores. Estarán equipados con hidrogeles con alcohol, guantes y mascarillas —al igual que los aviones y los trenes—. Para el transporte aéreo solo se podrán utilizar vuelos chárter, donde la distancia entre los pasajeros durante todo el vuelo será de mínimo dos metros. En los desplazamientos en tren no habrá servicio de cafetería, ni de catering a bordo. En cada fila de asientos se sentará una persona.
En los partidos
Los elementos de hidratación, como las botellas de agua o refrescos, serán desechables y tendrán un identificativo de cada jugador. Al llegar al vestuario y sus zonas anexas, se quitará el precinto de las instalaciones y se depositarán las equipaciones de cada jugador en una bolsa individualizada y desinfectada.
El primer equipo en llegar será el local. En el supuesto de que los jugadores del equipo local se desplacen en sus vehículos particulares, se les marcará una horquilla horaria de llegada al campo.
Se suprime cualquier acto protocolario: saludos con las manos, abrazos y fotos de equipos. En el descanso todos deberán cambiar su equipación al completo. Las ruedas de prensa posteriores serán telemáticas.