La CUP aprueba por la mínima el acuerdo con ERC tras la división interna
Los antisistema avalan por la mínima el apoyo a ERC y dejan en manos de Junts que la investidura fracase
La CUP ha optado finalmente por apoyar a Pere Aragonès en la investidura, tras las críticas de sectores internos de los antisistema como la organización Endavant –de la que forman parte personalidades como Anna Gabriel– o las juventudes de Arran, que veían el preacuerdo con ERC insuficiente y lejos de las expectativas.
La propuesta de preacuerdo ha cosechado un 59,31% de los votos, un total de 564), mientras que los que se han opuesto representan el 38,59% y 367 votos. Solo han votado en blanco el 2,10% de los miembros con derecho a voto, un total de 20 papeletas.
Eulalia Reguant lo ha comunicado desde el Parlament. Tras el resultado, los nueve diputados de la CUP votarán «afirmativamente» a la investidura de Aragonès. Eulalia Reguant ha emplazado a Junts a que se sume al acuerdo, que ahora está más lejos del no que del sí.
Junts aleja la investidura el viernes
Los más de mil inscritos en la Asamblea pudieron decidir si rubricaban el preacuerdo entre las dos organizaciones. La posición de los nueve representantes de la CUP durante el debate de investidura ha generado fricciones internas. La propia Reguant lo ha reconocido al insistir en que era un «acuerdo de mínimos».
La asamblea de la CUP ha puesto presión sobre Junts per Catalunya, que sigue enrocado en torpedear la investidura a menos de 24 horas de que se produzca. El partido de Puigdemont emplaza a seguir negociando «en los próximos días y semanas», y cuentan con el plazo de dos meses desde una investidura fallida.
ERC ha insistido en que las diferencias con Junts no son insalvables, pese a que el Consell per la República se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza. Este organismo opaco y paralelo de Carles Puigdemont pretende convertirse en una suerte de contrapeso.