Los repuntes tras dos meses de confinamiento cuestionan la desescalada

España ha registrado este jueves el tercer repunte consecutivo de fallecidos por coronavirus, 217 en las últimas 24 horas y supone además la cifra más alta de la última semana. El incremento abre las dudas cuando se cumplen dos meses del estado de alarma, en pleno inicio de la desescalada y con más de la mitad de la población en la fase 1 desde este lunes. 

El número de contagios, por su parte, se eleva a 272.646 casos detectados tanto con pruebas PCR como con test de anticuerpos. Según las cifras oficiales, se han recuperado un total de 143.374 pacientes. 

El Ministerio de Sanidad ha insistido en las últimas semanas en que la tendencia de la epidemia se ha estabilizado a la baja, a pesar de que sostiene que hay que elevar la «prudencia» para evitar los rebrotes. El propio portavoz gubernamental durante la crisis, el director del Centro de Alertas y Emergencias, Fernando Simón, pedía este miércoles «valorar con mucho cuidado» cifras como, por ejemplo, el incremento de casos detectado en los menores de 10 años.

«No parece que tenga que ver con los paseos de los niños, pero vamos a estudiarlo con mucho cuidado», ha señalado este jueves Simón, en su rueda de prensa diaria de seguimiento de la enfermedad. 

«Puede haber rebrotes si no hay medidas de protección. No va a depender de la tasa de seroprevalencia, sino de lo prudentes que seamos en los contactos», ha señalado el epidemiólogo. En este sentido, ha alertado de que se ha producido un desfase entre comunidades, a pesar de que ninguna presente cifras como para descartar el efecto de la inmunidad de rebaño. Sobre todo, tras conocer el alcance del 5% de la población revelado por el estudio de seroprevalencia, anunciado este miércoles. 

«Vamos a poder desescalar en la medida que la poblaciñon entienda que puede evitar la transmisión», ha asegurado Simón. 

La Rioja, con datos «espectaculares»

Para ejemplificar el desajuste entre regiones, el epidemiólogo ha señalado que La Rioja presenta datos «espectaculares», lo que refleja que sus sistemas de detección «han funcionado muy bien», no que se haya producido una inmunidad contra la enfermedad. Algo que no ha sucedido en «ninguna» comunidad. 

«Varias comunidades muestran un impacto muy bajo. Las medidas de prevención y contención favorecieron a las zonas en las que no se había expandido la enfermedad. Han sido una serie de factores», ha asegurado Simón, que ha señalado factores como la estructura socioeconómica o la densidad geográfica como condicionantes de la epidemia en las distintas regiones.