El coronavirus devora 480 millones de trabajos en el mundo
La crisis económica ha sido dramática en el sur de Europa, donde se ha registrado una caída del 18%, el equivalente a 10 millones de empleos, según la OIT
El coronavirus se ha convertido en el mayor destructor de empleo de la historia reciente. El impacto de la crisis provocada por la pandemia ha superado las peores expectativas, puesto que se ha producido una pérdida del 14% de las horas trabajadas en el mundo. En otras palabras, se han destruido 480 millones de empleos globales.
Así lo afirma la 5a edición del Observatorio de la Organización Mundial del Trabajo (OIT) sobre el impacto de la pandemia en el mundo del trabajo, según ha avanzado Europa Press. La caídas es peor a las previsiones, que auguraban un máximo del 10,7%. Esto supone un 3,3% menos del resultado final registrado.
El sur de Europa, gran perjudicado
La caída se ha notado especialmente en el sur de Europa, donde se encuentra España, puesto que se habría registrado una disminución del 18%. Esto se traduce en la pérdida de 10 millones de puestos de trabajo en esta zona del globo. Mientras, en el conjunto de Europa y Asia Central las horas bajaron un 13,9%, el equivalente a 55 millones de empleos.
La OIT también calcula que ha sido dramático en América, con una caída de las horas de trabajo del 18,3% –80 millones de empleos menos–; en Asia Pacífico bajaron un 13,5% –con pérdida de 280 millones de empleos–, y un 13,2% en los países árabes –10 millones de trabajos–. Además de un descenso de 12,1% de las horas trabajadas en África –55 millones de trabajos–.
La organización plantea varios escenarios desiguales en función de cómo evolucione la crisis del coronavirus para la segunda mitad de 2020. La OIT intenta así prever cuál será el impacto total de esta pandemia que ha supuesto una sacudida importante a las economías de todo el globo.
Varios escenarios de futuro
En el primer escenario se prevé un repunte de la actividad económica en línea con las previsiones actuales, el levantamiento de las restricciones en el lugar de trabajo y la recuperación del consumo y de las inversiones. En dicho caso, la OIT prevé una disminución en la pérdida de horas de trabajo del 4,9%, equivalente a 140 millones de empleos a tiempo completo en relación al cuarto trimestre de 2019.
Pero en el caso más pesimista, donde haya una segunda ola de pandemia y vuelvan las restricciones, habrá un ralentizamiento significativo de la salida de la crisis. Como consecuencia, se produciría un descenso de las horas de trabajo de 11,9%, con la pérdida de 340 millones de empleos en relación al final de 2019.
«Las decisiones que adoptemos ahora repercutirán durante los próximos años y más allá de 2030. Si bien los países se encuentran en fases diversas de la pandemia y es mucho lo que se ha hecho, debemos redoblar nuestros esfuerzos si queremos salir de esta crisis mejor que cuando comenzó», ha explicado Guy Ryder, Director General de la OIT.