Así será la alimentación tras el coronavirus
Un informe analiza cómo cambiarán los hábitos alimenticios tras la pandemia
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha publicado un informe en el que apunta que dos tercios de los españoles están abiertos a una dieta más sostenible y a cambiar sus hábitos tras la pandemia de coronavirus debido, entre otros motivos, al impacto negativo del sector de la alimentación en el medio ambiente.
La OCU ha realizado un análisis sobre 11 países de la Unión Europea entre octubre y noviembre del pasado año junto a otras organizaciones similares a nivel comunitario. Del estudio se desprende que un 62% de los consumidores está dispuesto a comprar frutas y verdura de temporada y el 67% a desperdiciar menos comida.
Una de las conclusiones más llamativas es que los consumidores «tienden a subestimar el impacto ambiental de sus propios hábitos alimenticios». En este sentido, un 61% considera que no repercuten en el medio ambiente mientras que un 26% señala que no lo tiene claro. Cerca de la mitad cree que sus hábitos tienen cierta influencia (47%) y un 24% cree que tienen mucha, aunque apuntan una serie de «barreras» como la falta de información o la dificultad de encontrar alimentos más sostenibles.
Solo uno de cada cinco españoles está dispuesto a gastar más dinero en una alimentación más sostenible, mientras que un 32% lo hará para favorecer los ingresos de los agricultores. En este sentido, un 43% se muestra a favor de más regulaciones en el sector agrario para cumplir con los estándares de sostenibilidad, y un 49% cree que el colectivo debería recibir más incentivos.
Un 61% reclama la obligatoriedad de la información en las etiquetas, y uno de cada cinco cree que los alimentos menos sostenibles deberían tener una tributiación más alta. Solo un 13% asegura que el gobierno está haciendo lo suficiente para fomentar la sostenbilidad en la producción.
Un 64% apuesta por productos vegetarianos
Sobre los productos lácteos, más de la mitad de los encuestados (55%) asegura no querer reducir su consumo mientras que uno de cada cinco afirma que sí lo está.
En cuanto al consumo de carne, un 42% afirma que ya ha reducido su ingesta -especialmente la de carne roja- debido al impacto de la industria cárnica en el medio ambiente. Un 29%, no obstante, sostiene que no reducirá su consumo. De los que sí son partidarios, un 64% prefiere los alimentos vegetarianos.