Convergència hará presidenta a Pastor para tener grupo propio
Francesc Homs ultima con el PP mantener el grupo parlamentario, que supone medios económicos, y visibilidad mediática
Convergència hará presidenta a Ana Pastor para tener grupo propio. Los nacionalistas catalanes –rebautizados ahora como Partit Democràta Català– necesitan ser reconocidos como grupo propio en el Congreso, porque, además de obtener visibilidad mediática, supondrá una inyección de dinero nada despreciable. Para ello, Convergència se abstendrá, en la segunda vuelta, tras negociar con el PP, en la votación de este martes para permitir que Ana Pastor presida el Congreso.
El líder de CDC en el Congreso, Francesc Homs, ultima las negociaciones con el PP para lograr ese objetivo, que también interesa a los conservadores, según fuentes parlamentarias. Pero ha querido ofrecer un gesto para la parroquia nacionalista, y presentará su candidatura en primera vuelta.
Mariano Rajoy ha propuesto a la ministra Ana Pastor, que es una de las piezas más valoradas por el Govern de la Generalitat. La buena relación de Pastor con el ex conseller de Foment, Santi Vila, en la última legislatura de Artur Mas, posibilitó diferentes acuerdos en infraestructuras. Y generó un clima de diálogo que estaba roto entre el propio Rajoy y Artur Mas.
Negociación con CDC y PNV
El PP necesita esa abstención de Convergència. Tras el acuerdo con Ciudadanos, el PP no tiene la mayoría absoluta necesaria, porque alcanza solo 169 diputados. Sin embargo, en la segunda vuelta, la abstención de Convergència sería suficiente, tras los votos de Ciudadanos. El PP también negociaba también con el PNV su abstención para que los nacionalistas vascos puedan tener grupo propio en el Senado.
Podemos alberga la esperanza de que el PSOE, y los nacionalistas catalanes, incluida Convergència, voten a su candidato, Xavier Domènech. En ese caso, no saldría elegida Ana Pastor.
Fuentes parlamentarias aseguran que la financiación del grupo parlamentario es vital, y que el dinero en juego puede ascender a unos dos millones de euros en una legislatura. Sólo en mailing un grupo parlamentario puede recibir un millón de euros de financiación pública. Depende de lo que haya gastado en la campaña. Si tiene grupo, se lo cobra todo. Y los gastos oscilan sobre el millón de euros.
La reunión de Homs y Rajoy
Francesc Homs ya exploró esa posibilidad en su reunión con Mariano Rajoy la pasada semana, tras pedir a Moncloa que no se facilitaran imágenes. Pero las negociaciones se han intensificado después de que el PP llegara a un acuerdo con Ciudadanos para llevar a la ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, a la presidencia del Congreso.
El caso es que Homs ha jugado a otras bandas. También se ha reunido con los dirigentes parlamentarios de Podemos, que quieren a los nacionalistas catalanes para poder elegir a Xavier Domenènech como presidente del Congreso.
Propuestas independentistas en la cámara
Homs se ha mostrado interesado. Pero esa fórmula depende del voto del PSOE, que no está dispuesto a votar a Domènech. Por ello, la abstención de Convergència ante la propuesta del PP, que supone una abstención, es más llevadera para los nacionalistas, aunque tiene un problema: los posibles reproches de Esquerra a CDC, y es que los dos partidos gobiernan juntos en Catalunya, bajo la denominación en el parlamento catalán de Junts pel Sí.
Sin embargo, ofrece otras muchas ventajas. A parte de los recursos económicos, Convergència podrá realizar propuestas en los plenos, con más tiempo para explicarlas.
Y eso supone que habrá dos grupos que defenderán proyectos independentistas, Convergència y Esquerra. El PP lo asume tras garantizarse la presidencia del Congreso, y dibujar la investidura, con las abstenciones de CDC y del PNV, a la espera de convencer a Ciudadanos de que vote a favor.