Convergència elige a Unió antes que a Esquerra en la Diputación de Girona
El pacto de gobierno entre los convergentes y los socialistas en el Ayuntamiento de la ciudad entierra la negociación con Esquerra para gobernar la corporación provincial
El presidente de la Diputación de Girona, el convergente Pere Vila, prefiere seguir gobernando con Unió, sus socios de toda la vida, que hacerlo con Esquerra, con los que su partido se ha sumado a la aventura de Junts pel Sí en el parlamento catalán.
CiU gobierna con mayoría absoluta en la corporación provincial, pero cuando los democristianos salieron del gobierno de la Generalitat en junio pasado, Pere Vila inició una negociación con ERC y con Independents per la Selva, un grupo político local, para incorporarlos al equipo de gobierno en substitución de Unió.
El objetivo era trabajar para la «plena soberanía»
Pere Vila argumentó el posible pacto con ERC y los independientes de la Selva en la necesidad de trabajar para la «plena soberanía» de Cataluña.
No obstante, las negociaciones con EREC se dilataron en el tiempo, primero por las elecciones catalanas del 27 de septiembre, después por las Generales del 20 de diciembre y, más tarde, con motivo de la formación del nuevo gobierno de la Generalitat, presidido desde enero por Carles Puigdemont, que hasta entonces era el alcalde de Girona.
Consecuencias del pacto con el PSC
Precisamente, el pacto entre Convergència y los socialistas en el Ayuntamiento de Girona, fraguado hace unas semanas, ha provocado la ruptura de las negociaciones con Esquerra para que se incorporase al gobierno de la Diputación provincial.
En declaraciones a Economía Digital, Martí Terés, concejal de ERC en el Ayuntamiento de Girona, confirma que los convergentes han dado marcha atrás en sus negociaciones con Esquerra en la Diputación por su pacto municipal con el PSC.
Tensiones en el feudo de Junts pel Sí
Convergència y Esquerra, socios de Junts pel Sí, han roto totalmente en las instituciones de Girona, precisamente en la demarcación donde han obtenido sus mejores resultados electorales cuando se ha presentado juntos.
El convergente Pere Vila ha dicho públicamente que las negociaciones con ERC «han dejado de ser una prioridad». Ahora, los convergentes gobiernan con el PSC en el Ayuntamiento y con Unió, en la Diputación, dos formaciones políticas alejadas de la hoja de ruta independentista.