Vidal Quadras y Piqué se erigen en ‘consejeros’ de Casado
El expresidente del PPC y el exministro alertan a Casado de no caer en el populismo y de no apropiarse de la Constitución
La Convención Nacional del Partido Popular estuvo marcada este martes en Valladolid por los consejos. Todo el mundo quiere asesorar, advertir o desear buena suerte a Pablo Casado en su camino hacia La Moncloa. En especial, el expresidente de Vox y del PPC, Alejo Vidal-Quadras y el exministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué.
Ambos realizaron intervenciones estelares, llamando la atención del público y también la del líder de los populares con sus finas críticas a la formación. Los dos se erigieron consejeros frente a los «difíciles retos» que tendrá que abordar el PP.
La clausura de la Convención Nacional este martes en Valladolid tuvo un nombre propio: Alejo Vidal-Quadras. Los que le conocen aseguran que la llamada de Casado para participar en este cónclave «no se la hubiera esperado en la vida» porque, tal y como él mismo recordó en directo: «En muchas ocasiones no fui fiel a la línea que marcaba la dirección».
Como un niño con zapatos nuevos, Vidal-Quadras inició su presentación con un «os echo de menos». La que fuera su casa durante muchos años quiere volverle a escuchar. ‘Unidad nacional y estado autonómico frente al nacionalismo’ fue el tema a tratar y Alejo no se mordió la lengua.
Bajo la bula de estar ahí presente como «independiente», Vidal-Quadras cargó contra los principales dirigentes del partido por ensalzar el Estado de las Autonomías: «Cuando todavía escucho a destacados dirigentes del PP afirmar que el Estado de las autonomías es la historia de un éxito, cuesta reponerse al estupor que produce semejante ceguera».
Su crítica provocó la respuesta de Edurne Uriarte, moderadora de la mesa y coordinadora de la convención, quien aseguró que «el Estado autonómico en España funciona» y «ha dado grandes éxitos». A lo que el fundador de Vox se refirió a «no dar instrumentos a los nacionalistas para que extiendan su poder».
«Una nación no puede poner en manos de sus peores enemigos los instrumentos para ser destruida», continuó por lo que no hay que dar «ni agua» a los separatistas para que «no puedan meter sus sucias manos en la unidad nacional». Así, pidió a Casado que no «flojee de piernas» ni le «tiemble el pulso» si en el futuro llega a gobernar, porque si no «esto se va al despeñadero».
El expresidente del PPC también cargó duramente contra Sánchez al señalar que «combina magistralmente el narcisismo, la mentira y la absoluta carencia de escrúpulos». Según el dirigente, «a aquellos que dan golpes contra la democracia no hay que darles ninguna parte de verdad, porque viven instalados en la mentira, ni ninguna parte de razón, porque no tienen ninguna».
Piqué advierte a Casado
El exministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, también advirtió y aconsejó a Casado durante su turno de intervención. El catalán también dejó claro su amplia libertad en la Convención asegurando que «ahora no soy militante del PP, sino cotizante».
Piqué participó en la mesa de debate bajo el título ‘Concordia, Constitución y Patriotismo’ para advertir que el populismo no se combate con más populismo sino «con convicciones firmes expresadas con moderación y con sentido común». Un claro aviso a los populares para que rebajen el tono de crispación en la Cámara Baja y demás instituciones frente al discurso de Vox.
Un día antes, el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, también aconsejó a Casado al respecto: «No debemos caer en las trampas, por ejemplo de los postulados nostálgicos, algo que nunca hemos sido. No hemos sido xenófobos, insolidarios, reaccionarios… Eso se lo dejamos a otros partidos», dijo el dirigente que en su región gobierna sin presencia ni de Vox ni de Ciudadanos.
Pero Piqué fue más allá pidiendo ensalzar y proteger la Constitución. El exministro pidió a los populares que no se apropien de la Constitución. «La Constitución fue la primera en la que el consenso primó por encima de todas las consideraciones».
Es algo que los populares deberían de primar sin apropiarse porque «los extremos minan las democracias ninguneando al Parlamento, limitando su actividad legislativa, sus labores de control, abusando de los decretos leyes y aprovechando cualquier circunstancia para que no legitime el verdadero poder del Legislativo y Judicial», continuó.
El popular, dirigiéndose hacia Pablo Casado aseguró que el secreto del futuro de España pasa porque «Europa triunfe en su proyecto político de integración y tome el camino para ser un sujeto político relevante».
Casado también se llevó los piropos del expresidente del Consejo Europeo polaco Donald Tusk, quien definió al líder del PP como la «esperanza de la política europea» precisamente porque, a su juicio, «no acepta las oscuras profecías sobre el declive de occidente ni del triunfo de los extremismos».
Los populares han celebrado ya dos de las siete jornadas de la convención nacional diseñada por su líder, Pablo Casado, que ha escuchado en Santiago y Valladolid, y este miércoles todos los dirigentes se desplazarán hasta la capital para recibir entre otros al expresidente francés Nicolas Sarkozy, recientemente imputado por corrupción, o al expresidente de la Comisión Europea y de Portugal, José Manuel Durao Barroso.
Un acto que estará marcado por la ausencia de la anfitriona, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. La cúpula del partido pidió a sus barones aparcar las rencillas y no sacar este asunto durante la Convención y en los dos primeros días lo están cumpliendo a rajatabla. Más difícil va a resultar en su propia ciudad. Pero para ello y desde primera hora, el PP fía todo al alcalde José Luis Martínez Almeida, quien charlará con Barroso sobre ‘El Mundo post Covid’.