Golpe del TC catalán a los avales del ICF

El Consell de Garanties Estatutàries ha pedido limitar temporalmente el papel del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) como avalista de los líderes del procés para cubrir las fianzas del Tribunal de Cuentas que ascienden a un total de 5,4 millones de euros.

El organismo ha dado su visto bueno al decreto del Govern, pero recomienda modificar algunos artículos, como el que atribuye al ICF una tarea temporal como avalador y precisar durante cuánto tiempo, detallando que esta debe ser «excepcional y muy limitada en el tiempo».

La decisión se ha adoptado de forma unánime en el pleno del Consell, que ha especificado que la creación del fondo no se puede considerar «malversación de caudales públicos» ni «sustracción» de dinero público. Todo ello porque, según la norma, «no se desprende que la Generalitat asuma como propia la responsabilidad contable de sus servidores públicos». 

El órgano consultivo recibió la petición tanto del PSC como de Cs y el PP de estudiar si el decreto del Gobierno de Pere Aragonès cumplía con la Constitución y con el Estatut. Tras su deliberación, el pleno del Parlament hará efectiva la convalidación del texto después de una reunión de la Mesa y de la Junta de Portavoces.

En vista del decreto, el ICF depositó la semana pasada ante el órgano fiscalizador de la contabilidad pública la liquidación solicitada para cubrir las multas impuestas a los 34 ex altos cargos del Govern, en concepto de responsabilidad contable por el presunto uso irregular de fondos para abrir y mantener las llamadas ’embajadas catalanas’ y el Diplocat entre 2011 y 2017.

De todos modos, en el Ejecutivo catalán siguen trabajando para que una entidad financiera extranjera cubra los avales que reclama el Tribunal de Cuentas y no el ICF, después de la negativa de la banca española.