Compromís dice que Valencia también es de «raíz foral»: pide trato especial en la nueva España de Sánchez y los nacionalistas

Valencia también pide paso. Aunque Moncloa lo quiere evitar por todos los medios, sabe que es inevitable que si quiere conseguir los apoyos para investir a Sánchez como nuevo presidente del Gobierno, toca abrir el melón territorial, y tras el paso al frente del lehendakari, Íñigo Urkullu, sólo era cuestión de tiempo que otras formaciones regionalistas reclamaran un sillón en la mesa donde discutir cómo será esa nueva España.

Así, fuentes de la dirección de Compromís aseguran a este periódico que defenderán la propuesta del PNV y que incluya la reforma de la financiación autonómica. «La Comunidad Valenciana es histórica, de raíz foral, como dice el propio Urkullu, que tiene ahora mismo debates importantísimos por resolver, como el de la finaciación o el de recuperar nuestro propio derecho foral como tienen otras ocho comunidades autónomas», comentan.

Compromís y su portavoz en les Corts, el Parlamento autonómico valenciano, Joan Baldoví, aseguran en declaraciones a ECONOMÍA DIGITAL que creen que «hay que perder el miedo a hacer reformas o interpretaciones abiertas de la Constitución, es algo que se hace de manera habitual en el resto de Europa». No van a registrar ninguna iniciativa, al menos «en principio», pero sí estarán pendientes «de cómo va evolucionando todo esto y, evidentemente, si esto se aborda defenderemos que participen todas las CCAA y que se incluya la reforma del sistema de financiación autonómica«.

«Estamos de acuerdo en que se abra un debate respecto del autogobierno, de los estatutos de autonomía, pero no sólo limitado al País Vasco o Cataluña«, ahonda Baldoví, que hasta la pasada legislatura era la voz de su formación en el Congreso y el encargado de las negociaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez. «La propia Constitución reconoce el derecho a que tengamos los mismos derechos si así lo deseamos», recuerda.

Moncloa y PP miman a Urkullu

La propuesta del lehendakari Íñigo Urkullu de avanzar en el modelo territorial para dar «más autogobierno» al País Vasco, el resto de comunidades históricas y Navarra, sin tocar la Constitución, que plasmó en una tribuna en El País, ha revuelto las aguas en torno a la negociación de la investidura de Sánchez y la posible legislatura que le toque afrontar, aunque técnicamente el turno esté en manos del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que tiene fecha para su Pleno en el Congreso el 26 y 27 de septiembre, aunque no ha reunido los apoyos suficientes y será fallida, si nada cambia.

De hecho, tanto el Gobierno como el Partido Popular han evitado desairar al lehendakari, limitando su respuesta en que cualquier reforma del modelo territorial debe hacerse siempre dentro del marco constitucional. El PP está buscando los cuatro votos que le permitirían llegar a la Moncloa, aunque el propio Feijóo ha reconocido que la posibilidad de éxito es lejana, mientras que el Gobierno de Pedro Sánchez sondea ya a sus posibles socios de investidura. En ambos casos la mirada está puesta en el PNV.

Desde el Gobierno, el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, valoró la propuesta, que calificó de «muy legítima», pero Moncloa, según las fuentes consultadas por este periódico, no quiere echar más leña al fuego ni complicar más la apertura del melón territorial, tras haber dejado para el próximo año una posible reforma del sistema de financiación autonómica.

Los barones del PP lo avalan, menos Ayuso

El mismo énfasis en el marco constitucional se ha repetido en las filas del PP. El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, dijo en sus redes sociales que «está bien» dialogar para avanzar en autogobierno, como plantea el dirigente del PNV, «pero sin relegar a nadie y siempre dentro de la Constitución». «Andalucía conquistó su autonomía por la misma vía que el resto de las comunidades históricas y eso hay que respetarlo».

Otro líder regional del PP, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, también valoró la propuesta para avanzar en el carácter plurinacional del Estado y en el desarrollo del autogobierno sin modificar la Constitución, ya que considera que va «bien encaminada», pero ha advertido que no puede implicar «desigualdades».

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha respondido en sus redes sociales: «Su objetivo: una república federal laica plurinacional», ha escrito la dirigente popular, quien ha pedido que «nos expliquen a todos los españoles qué es “reinterpretar la Constitución”. También crítica ha sido la reacción desde Castilla y León, donde el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, ha rechazado el modelo territorial basado en la «asimetría».