Comín arma un cirio con el mayor concurso sanitario
Las empresas que se han quedado provisionalmente fuera de la licitación para subministrar gases medicinales anuncian que llegarán hasta la última instancia judicial
Toni Comín comete los mismos errores que Boi Ruiz, su antecesor al frente del departamento de Salud de la Generalitat. Tal como ocurrió con el concurso del transporte sanitario, convocado y adjudicado por Ruiz en la anterior legislatura, el presente concurso de terapias respiratorias, también convocado por Ruiz pero que será adjudicado por Comín, está generando otro conflicto que puede acabar en los tribunales.
Al concurso de terapias respiratorias, con un presupuesto cercano a los 450 millones de euros para los próximos diez años, se presentaron seis empresas, cinco de las cuales son las que gestionan este servicio en la actualidad. Una de las sociedades, Linde Medicinal, filial del grupo alemán Linde AG, se ha impuesto provisionalmente en 12 de los 18 lotes en que se divide la licitación.
En segundo posición, con cinco lotes, se ha situado Vivisol, filial de la italiana Sol Group, pese a que era la primera vez que se presentaba a la licitación del departamento de Salud y que apenas cuenta con experiencia en el ámbito sanitario catalán. Finalmente, Oxigen Salut podría llevarse el último lote, testimonial, por corresponder a la demarcación del Pirineo y ser uno de los de menor importe económico.
Vuelco total en el sector
Esta clasificación provisional, aún pendiente de revisión, supone un vuelco total respecto a los actuales gestores del servicio de subministro de gases medicinales, que son los que se impusieron en el concurso de 2009, convocado por el tripartito de José Montilla. En aquella ocasión, la catalana Esteve, con cuatro lotes; una filial de la francesa Air Liquide, con otros cuatro; y la madrileña Oximesa, con dos, fueron los grandes triunfadores. Ahora se han quedado fuera.
Entre las empresas perdedoras también se encuentra Oxigen Salud, que puede pasar de gestionar cuatro lotes, obtenidos en 2009, a tan sólo uno, el del Alto Pirineo. En declaraciones a Economía Digital, fuentes de las empresas que han quedado fuera de la clasificación provisional aseguran que no se quedarán de brazos cruzados.
En primer lugar, presentarán alegaciones y, si no son aceptadas, interpondrán los correspondientes recursos durante el trámite administrativo. No descartan acudir a los tribunales. «Llegaremos hasta el final, hasta dónde sea necesario», advierte un directivo.
Desde estas empresas se advierte que es «imposible» presentar rebajas en el precio de licitación de hasta un 38%, tal como ha hecho Linde en algún lote, sin que se resienta la calidad del servicio. Otro directivo precisa que mirarán con lupa si Linde ha incurrido en bajas temerarias, que serían motivo de exclusión.
La adjudicación definitiva se espera para finales de año
El departamento de Salud todavía debe revisar la clasificación y, después de analizar las alegaciones, efectuará la adjudicación provisional, que puede ser recurrida. La adjudicación definitiva se espera para final de año.
Tal como establece el pliego de condiciones, ninguna empresa puede acaparar más de 7 lotes. Por este motivo, Linde deberá renunciar a 5 de los 12 en los que se ha clasificado en primera posición, que serían los de menor cuantía. En el anterior concurso de 2009, Air Products Sud Europa (anterior denominación de Linde Iberia) se llevó tan solo dos lotes.
Previsiblemente, la adjudicación definitiva será muy distinta de la clasificación provisional elaborada por el departamento de Salud, pero, pese a ello, las fuentes consultadas critican que en estas listas «cuela todo». «No sólo hay en juego un contrato económico, sino muchos puestos de trabajo», recuerda un directivo.