El PP derrota a Colau por el caso Lanza
El popular Alberto Fernández Díaz consigue el apoyo del Pdecat, PSC y Ciudadanos para censurar el apoyo de Colau al documental Ciutat Morta
El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha censurado este viernes a la alcaldesa, Ada Colau, y a Barcelona en Comú por entender que se aprovecharon políticamente del documental Ciutat Morta. Este reportaje cinematográfico presentó como un montaje policial el caso de Rodrigo Lanza, condenado por dejar tetrapléjico en 2006 a un agente de la Guardia Urbana y que, hace unos días, fue detenido por la presunta agresión mortal a un ciudadano de Zaragoza.
El concejal popular Alberto Fernández Díaz consiguió que se aprobara una moción para censurar la actuación de Colau y de su partido por la defensa del documental Ciutat Morta, realizado en 2014, antes de su llegada a la alcaldía. La moción obtuvo los votos a favor del PP, Ciudadanos, PSC y del grupo Demócrata (Pdecat). En contra votaron Barcelona en Comú, ERC y la CUP.
A través de la moción aprobada, Alberto Fernández exige al gobierno de Colau que condene la agresión al vecino de Zaragoza, retire el premio que el ayuntamiento concedió al documental, que se disculpe ante la Guardia Urbana y que presente un “relato alternativo” sobre el incidente en el que un agente resultó gravemente herido. El policía Juan José Salas está en sillas de ruedas desde que recibió una pedrada en la cabeza cuando participaba en un operativo en una casa ocupada.
El Pdecat califica el documental ‘Ciutat Morta’ de “propagandístico”
Jordi Martí, del Pdecat, acusó a Barcelona en Comú de aprovecharse del documental por motivos políticos. Martí exigió a Colau una “profunda reflexión sobre la ética de la propaganda que se utilizó para desgastar a adversarios”. Definió a Ciutat Morta como “documental propagandístico”, aunque no pidió que se le retirara el premio Ciutat de Barcelona porque lo concedió un jurado independiente.
La socialista Carmen Andrés, hasta hace poco socia de gobierno de los comuns, reclamó “reflexión y autocrítica a los que participaron en el desprestigio de la Guardia Urbana” al apoyar la teoría del montaje policial. Reclamó un reconocimiento público para el agente Juan José Salas y que se condene la agresión de Zaragoza. Marilén Barceló, de Cs, reclamó una reparación para Salas.
Jordi Coronas, de ERC, votó en contra por considerar que persisten las “sobras de duda” en la gestión de la Guardia Urbana que hizo el gobierno del exalcalde socialista Jordi Hereu. Coronas insistió en que a los agentes se les defiende dotándolos de más recursos humanos y materiales. Expresó su condena a cualquier agresión por motivos de odio.
Maria Rovira, de la CUP, fue la única que mostró “solidaridad” con Lanza, que cumplió cuatro años y medio de cárcel por los hechos de 2006 y que hace unos días fue detenido por una agresión mortal en Zaragoza. Rovira indicó que los responsables del documental mantienen que condenaron a Lanza por un montaje policial.
Pisarello esquiva las críticas por el caso de Lanza, detenido por la agresión de Zaragoza
Gerardo Pisarello, primer teniente de alcalde, indicó que la moción del PP era “instrumentalizadora” porque mezclaba dos hechos –uno en Barcelona de hace once años y otro en Zaragoza– que no tenían conexión entre ellos. Lamentó esta última agresión, si bien recordó que se debe respetar la presunción de inocencia y que se debe dejar actuar a la Justicia. Sobre el relato alternativo que le reclama el PP sobre Ciutat Morta, Pisarello señaló que los hechos en los que se basa ya han sido sentenciados por los tribunales.
Pisarello recordó que el parlamento catalán reclamó por unanimidad que se investigaran los hechos denunciados en el documental. Precisamente, entonces eran diputados en la cámara catalana los ahora concejales Jaume Collboni (PSC), Carina Mejías (Cs) así como el delegado del gobierno central, el popular Enric Millo. Los comuns no entonaron ningun mea culpa por el apoyo que prestaron a Lanza en el pasado.