Colau endosa a las energéticas los impagos de las familias sin recursos
La teniente de alcalde de Servicios Sociales, Laia Ortiz, exige que las compañías carguen al menos con el 50% del coste de la pobreza energética
El Ayuntamiento de Barcelona planea dejar de pagar las deudas por el consumo de gas y electricidad de personas vulnerables. La alcaldesa Ada Colau pretende que estos gastos vayan a cargo de las empresas suministradoras. Su teniente de alcalde de Servicios Sociales, Laia Ortiz, afirma que, por ley, estas compañías no pueden cortar el suministro a las familias sin recursos, aunque el Ayuntamiento deje de abonar parte de sus deudas energéticas.
El Ayuntamiento de Barcelona pretende forzar así a las compañías suministradoras para que firmen convenios mediante los cuales asuman el coste de la pobreza energética. Laia Ortiz las amenaza con que «o forman parte de la solución o la deuda de las familias estará en el tejado de las compañías» porque los servicios sociales dejarán de pagarlas.
Aunque el Ayuntamiento de Barcelona deje de conceder ayudas, Laia Ortiz asegura que no aumentarán los cortes de luz o gas porque en Cataluña las empresas suministradoras tienen la obligación, tal como prevé la ley de pobreza energética, de no cortar el suministro a personas vulnerables porque si lo hacen son sancionadas.
La teniente de alcalde ha estimado que las compañías deberían cargar, como mínimo, con el 50 % del coste de la pobreza energética en Barcelona, que asciende a unos 3 millones de euros anuales.