Colau clama ahora contra los delincuentes multireincidentes
La Generalitat presenta ocho medidas para luchar contra la delincuencia en Barcelona, una de las cuales destinada específicamente al top manta
Barcelona tendrá más policía. Los Mossos reabrirán la comisaría de Plaza Cataluña, en la que trabajarán conjuntamente con la Guardia Urbana para atajar el incremento de la delincuencia en la ciudad.
Esta es una de las ocho medidas que se han anunciado en la junta de seguridad local de este viernes que contó con la presencia de la alcaldesa, Ada Colau, y del consejero de Interior, Miquel Buch.
En esta reunión se constató que, en el primer semestre de este año, los delitos contra el patrimonio han subido cerca de un 10% en Barcelona. Los robos con violencia o intimidación en la vía pública se incrementaron un 35%; los hurtos, en un 8,3%; y los robos con fuerza en establecimientos comerciales, un 66%.
Colau subrayó la necesidad de abordar un cambio en el “tratamiento judicial de la multirreincidencia”. Por ejemplo, los carteristas del metro de Barcelona actúan con impunidad: cuando se les detiene, se les imponen multas, pero vuelven de delinquir de forma repetida.
Todos los miembros de la junta coincidieron en la necesidad de cambiar el criterio judicial de reincidencia. Se pidió la colaboración de la fiscalía, pero, curiosamente, una de las escasas ausencias de la reunión fue la de la fiscal jefe de Barcelona, Concepción Talón. Los asistentes consideran necesario crear una fiscalía especializada en hurtos.
Primera acción de Batlle
El primer teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, indicó que una de sus primeras acciones desde que esta semana tomó posesión del cargo ha sido contactar con la fiscalía y la judicatura para luchar contra la impunidad de los multireincidentes.
Entre las medidas anunciadas por el consejero Buch destaca el incremento de la dotación de Mossos destinada a Barcelona en 320 agentes. En realidad, de este contingente, 137 corresponden a los agentes en prácticas de la última promoción que empezaron el pasado junio. El resto de agentes se incorporará después del verano procedentes de unidades y servicios que en la actualidad operan fuera de Barcelona.
Los Mossos y la Guardia Urbana de Barcelona se coordinarán para luchar contra el top manta. Precisamente, Buch indicó que la venta ambulante ilegal también genera “inseguridad”.