Ciudadanos negocia con comunes y el independentismo impulsar la regulación de la prostitución
La formación naranja presentará una moción en el Parlament "para reconocer la realidad del trabajo libre y voluntario de las personas que ejercen el trabajo sexual"
Imagen de una manifestación de personas que ejercen la prostitución / EFE
Ciudadanos defenderá una moción, la próxima semana en el Parlament, para la regularización de la prostitución. La formación naranja quiere reconocer “la realidad del trabajo libre y voluntario de las personas que ejercen el trabajo sexual”. Antes del debate en la cámara catalana, Cs negocia apoyos con los Comunes, ERC, Junts y la CUP. El contexto nacional de Ciudadanos obliga a los representantes en Cataluña a mantener un papel menos beligerante y anclado a la centralidad.
Una defensa de los derechos de los y las trabajadoras sexuales que, desde Ciudadanos, pretende contrarrestar la ley aprobada en el Congreso de los Diputados, hace unas semanas, a propuesta del PSOE y con el apoyo del Partido Popular y Unidas Podemos.
A grandes rasgos, la reforma estatal quiere modificar el código penal para eliminar el proxenetismo y ampliar las sanciones para los clientes de 12 a 24 meses de cárcel, un período que se puede ampliar en casos de menores de edad.
Los independentistas y Comunes no ven con malos ojos el planteamiento de Cs
A falta de la votación, los partidos independentistas en el Parlament y los Comunes se han mostrado receptivos a validar el planteamiento de Ciudadanos. Esquerra, CUP y los compañeros de Ada Colau aceptan el sentido global de la propuesta naranja y, seguramente, parece que solo se limitarán a presentar alguna enmienda.
El documento presentado en el registro de la cámara catalana destaca el rechazo a la concepción de “penalizar o castigar judicialmente” a las personas que ejerzan, libremente, la prostitución. En este sentido, desde Cataluña se insta a garantizar el acceso a la Seguridad Social y otros derechos laborales.
Junts todavía está en proceso de estudiar la moción, pero comparte el espíritu positivo de las anteriores formaciones citadas. Todas ellas ven el debate en el Parlament, como una forma de visibilizar el rechazo al discurso del Gobierno, acerca de la prostitución.
Recoger la voz de colectivos sociales
Los promotores de la moción quieren dar cabida a las asociaciones y otros colectivos vinculados a la prostitución, desde la perspectiva social. “Nadie entendería hablar de un pacto social sin diálogo con las personas implicadas”, apunta Anna Grau. En este sentido, la diputada de Ciudadanos añade que feminismo “es solucionar los problemas de la gente, no entrar en debates simbólicos”.
Implicación del Estado
En caso que la moción de Ciudadanos tire hacia adelante, la formación naranja quiere que el texto sirva de base legal para reformar todos los ámbitos con competencias de la administración autonómica. Cs puntualiza que, delante una modificación legal de estas características, la Generalitat tiene que presionar al Estado para agilizar los permisos de residencia y trabajo a las personas víctimas de las mafias de explotación sexual.
En el año 2020, un informe del Gobierno cifró en más de 45.000 el número de mujeres que ejercen la prostitución, de las cuales un 90% son víctimas de bandas organizadas. España es considerado un país de tránsito y destino de las personas que viven bajo las amenazas del proxenetismo.
Otro dato preocupante para las administraciones es la edad de los consumidores de prostitución. La Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida alerta, desde hace años, que el perfil de cliente ha descendido de la franja 25-35 años a la mayoría de edad.
