La política española, en su peor momento en 35 años
La valoración negativa de los españoles sobre la clase política se dispara a su máximo histórico desde 1985, según el CIS
Desde 1985, hace casi 35 años, los españoles no estaban tan preocupados por la situación política. Lo único más agobiante que la política, según los ciudadanos, es el paro. Fuera de ello, los aparatos gubernamental, administrativo y parlamentario del Estado son los que más bajan el ánimo a los españoles, según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
La política, los partidos y los dirigentes en general ya están entre los tres principales problemas para los españoles. El 32,1% de los encuestados afirma que lo que sucede en esta esfera intranquiliza sus vidas (su máximo histórico desde la década de 1980), mientras que el 26,7% dice lo mismo de la corrupción. El paro es el problema más acusado, con un 64,6% de menciones.
La mala racha en la reputación de los políticos la demuestran otras cifras. El 52,4% de los entrevistados valoraron la política de forma «mala o muy mala», un aumento del 1,6% desde las elecciones municipales y autonómicas del 26 de mayo. Y los que la ven «buena o muy buena» son cada vez menos: pasaron del 9,9% al 8,1%.
Los españoles no ven salida a la crisis política
La –hasta cierto punto– caótica legislatura de Pedro Sánchez, el terreno de indefinición en el que entraron las distintas fuerzas políticas desde los referidos comicios de mayo y las elecciones generales del 28 de abril, y el interminable conflicto territorial en Cataluña serían catalizadores de la desazón de los ciudadanos con el poder.
Pero también lo es la incertidumbre. No se trata solo de que la política española es cada vez más convulsa (o que deja esa sensación semana tras semana), sino también de que es casi imposible para los ciudadanos imaginar un escenario en el futuro cercano en el que haya un retorno de la tranquilidad. No se ve una salida, es decir.
Así también lo recoge el CIS en las respuestas a la pregunta sobre la percepción que se tiene del futuro de la situación política. Si en mayo el 38,2% pensaba que la situación política será igual dentro de un año, ahora sube hasta el 42,7%. Por el contrario, el grupo de quienes consideran que mejorará pierde un 2,8% de afiliación, hasta el 20,6%.
Las encuestas del barómetro que el CIS publicó este miércoles –en el que el PSOE se dispara en pleno pulso con Podemos– se realizaron entre el 1 y el 11 de junio, después de las elecciones del 26-M, con el Gobierno en funciones y sin mucha claridad sobre los acuerdos para la investidura. En ese sentido, la situación no ha cambiado mucho desde entonces.
Otros problemas a los que apuntan los españoles son la sanidad, la calidad del empleo, la inmigración, los asuntos de índole social, la independencia de Cataluña, las pensiones, la educación y la violencia de género, siempre según los resultados del centro dirigido por el socialista José Félix Tezanos.