La CEOE se siente menospreciada por Sánchez e Iglesias
La CEOE advierte que el acuerdo entre Pedro Sánchez e Pablo Iglesias para subir el salario mínimo a 900 euros puede vulnera el diálogo social
La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) que preside Joan Rosell advirtió este jueves que el acuerdo entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) a 900 euros “cuestiona el diálogo social”.
El presidente del Gobierno pactó esta medida con el líder de Podemos para conseguir su apoyo a los presupuestos generales del Estado. Después de anunciar este acuerdo político, la CEOE les recordó que la patronal y los sindicatos ya han pactado el incremento del salario mínimo en el acuerdo de negociación colectiva.
En un comunicado, la CEOE advierte que la medida acordada entre el Gobierno y Podemos tendrá unos “efectos negativos” en la negociación colectiva. Además, repercutirá negativamente en la contratación pública pactada con las empresas, así como en los convenios colectivos en vigor.
El SMI en 2018 es de 735 euros mensuales. Según el acuerdo alcanzado el 26 de diciembre de 2017 entre patronal, sindicatos y el Gobierno, se establecía que el salario mínimo sería de 773 euros en 2019 y que, para 2020, alcanzaría los 850 euros. Para materializar esta subida deben cumplirse dos condiciones según lo acordado: un incremento del PIB superior al 2,5% y un aumento de la afiliación media a la seguridad social de 450.000 personas.
Este jueves, Rosell se mostró en desacuerdo con el incremento anunciado del SMI y apuntó que hay convenios colectivos que hay que respetar «y no se pueden tirar por la ventana».
Garamendi coincide con Rosell
Antonio Garamendi, que sucederá a Rosell al frente de la CEOE el próximo noviembre, también cargó contra el acuerdo entre Sánchez e Iglesias. Aprovechó un acto de Cepyme para pedir también que la subida de las pensiones no se condicione solo al IPC. Propuso tener en cuenta otras variables, como el crecimiento económico.
Sobre los aspectos fiscales del acuerdo presupuestario, Garamendi subrayó que «lo tienen que estudiar», aunque prevé que repercutirá a pequeñas, medianas y grandes empresas. Insistió en que la desaceleración económica pide «gestionar mejor y no gastar más», por lo que exigió al Gobierno no hacer programas electorales con temas «tan importantes» para la economía y la sociedad.
