Cementerios de Barcelona impone sus urnas a los clientes
Cementeris de Barcelona es una empresa municipal que aplica recargos a los que compran urnas para cremación a los operadores privados
La funeraria Áltima ha presentado una instancia ante el Ayuntamiento de Ada Colau en la que denuncia la posición de “dominio y abuso” que ejerce la empresa municipal Cementerios de Barcelona (CBSA) por lo que respecta a los servicios de cremación. No sólo gestiona las cremaciones en régimen de monopolio, sino que penaliza a las operadoras privadas que suministran urnas para las cenizas a sus clientes.
Cementerios de Barcelona se encarga en exclusiva de las cremaciones y de suministrar las urnas cinerarias. Si un cliente la compra a otro operador, se le aplicará una tasa adicional. Áltima denuncia que se les impone este recargo desde este marzo, cuando han empezado a ofrecer a sus usuarios la posibilidad de adquirir las urnas. En estos casos, CBSA ha gravado “automáticamente” a los clientes de Áltima con una tasa adicional nunca aplicada hasta este momento.
Áltima entiende que la empresa municipal CBSA mantiene una “conducta abusiva” porque vincula la venta de urnas a la contratación de los servicios de cremación, de los que tiene el monopolio. Si no les compran las urnas, les imponen un gravamen en forma de tasa.
La empresa municipal exige exclusividad a sus proveedores
Josep Ventura, director general de Áltima, considera que CBSA aplica “medidas discriminatorias” que inciden en la competividad y en los servicios que prestan a los clientes. En el pliego técnico para la homologación de proveedores de urnas cinerarias y relicarios, aprobado en febrero de 2016, se establece una cláusula de exclusividad contraria a la normativa de Competencia. CBSA exige a sus proveedores homologados que les suministren productos en exclusiva en un radio de 50 kilómetros a la redonda de Barcelona.
La funeraria de Colau: en el pleno del 28 de abril se decide si tira adelante o queda en vía muerta
El Ayuntamiento de Barcelona abordará en el pleno del próximo viernes la creación de una funeraria municipal. Salvo la CUP, todos los grupos de la oposición –CiU, Ciudadanos, ERC y PP- se mostraron muy críticos con el proyecto de Colau. Los operadores privados acusan al equipo de gobierno de desconocer el sector.