Los CDR boicotean al Rey en su homenaje a las víctimas del 17-A
Los CDR convocan una marcha silenciosa en homenaje a las víctimas del atentado del 17-A al margen del acto oficial con el Rey, Sánchez y Torra
Los Comités de Defensa de la República (CDR) han convocado para este viernes una marcha silenciosa en homenaje a las víctimas de los atentados terroristas de Barcelona del 17 de agosto del año pasado. Se trata de un acto paralelo al oficial, al que no acudirán por la presencia del rey Felipe VI.
El acto de los CDR se iniciará media hora antes del homenaje oficial convocado por el Ayuntamiento de Barcelona que contará con la presencia del Rey, de Pedro Sánchez, la alcaldesa Ada Colau y también de Quim Torra, entre otras autoridades.
Pese a que el actual presidente de la Generalitat declaró hace unas semanas que “Felipe VI ya no es el Rey de los catalanes”, Torra participará en el acto oficial. También estarán presentes las delegaciones del Pdecat y de ERC.
En cambio, los CDR han convocado a sus seguidores a las 10 de la mañana, en la plaza Portal de la Pau, situada al final de la Rambla. Desde allí caminarán hasta el mosaico de Miró, donde quedó bloqueada la furgoneta que se utilizó en el atentado. En ese punto leerán un manifiesto.
A través de las redes sociales, los CDR llaman a la participación a su acto para homenajear a las víctimas y, al mismo tiempo, expresar su repulsa al monarca. “¿Eres un político y vas al acto del 17-A con el Rey y los partidos del 155? Entonces no eres nuestro político. Ven a rendir homenaje a las víctimas”, pregonan en Twitter.
Ataques de los CDR al Pdecat y ERC
En la misma línea que Torra, los CDR mantienen que el jefe del estado ha dado cobertura a la “represión” contra los que votaron en el referéndum del pasado 1 de octubre (1-O). Recuerdan que se produjeron más un de millar de heridos.
Sin embargo, en las últimas semanas estos grupos próximos a la CUP han remarcado sus diferencias con las dos formaciones que apoyan al gobierno de Torra. Protagonizaron concentraciones de protesta ante las sedes del Pdecat y de ERC para exigir que los miembros del gobierno de la Generalitat desobedecieran al Estado o presentaran la dimisión. Esta situación generó tensiones entre estas formaciones y la CUP.