Cayetana Álvarez de Toledo hará campaña en Cataluña sin coincidir con Pablo Casado
El PP catalán busca un difícil equilibrio para aprovechar a la diputada electa por Barcelona en la precampaña sin irritar a la dirección nacional del PP
Arrinconada por el presidente del PP, Pablo Casado, pero apreciada por el líder de los populares en Cataluña, Alejandro Fernández. No es sencillo adjudicarle un papel a Cayetana Álvarez de Toledo —diputada electa por Barcelona— en la campaña de las elecciones al Parlament, pero el PP catalán quiere hacerlo.
«Nos faltan manos», dicen en el PP catalán, de entrada, cuando se les pregunta por la reciente presencia de Álvarez de Toledo en un acto de precampaña del partido centrado en las enmiendas que sus diputados nacionales han presentado al proyecto de presupuestos generales del Estado.
No quiere el PP catalán prescindir de las figuras a su alcance. Y no tiene tantas. Cayetana, escogida como diputada en Congreso después de ser número 1 por Barcelona, es una de ellas. ¿Levanta ampollas? Sí, las levanta. Pero no por eso hay que sepultarla, porque también «tiene público y tiene tirón mediático».
«La idea es simple y es complicada. Es simple porque queremos que participe en la precampaña y que lo haga incluso de forma ordinaria. Hay una ventaja: ella está dispuesta y nosotros contamos con ella. Y es complicado porque sus relaciones con la dirección nacional del PP desde que fue cesada como portavoz parlamentaria son las que son», explican fuentes del partido, conscientes de que no va a ser sencillo hallar un equilibrio.
El PP busca manos: de Álvarez de Toledo a Feijóo y Almeida
Pueden pasar los años y cambiar muchas circunstancias, pero hay algo que es inmutable: no hay campaña del PP en Cataluña que no recurra al desembarco de dirigentes nacionales. Y la del próximo 14 de febrero no va a ser excepción.
Quiere Alejandro Fernández, casadista de primera hora, que el líder del PP esté presente en Cataluña tanto como pueda y lo permita la pandemia. Cada una de sus presencias se traducirá en una ausencia de Álvarez de Toledo. «No es buena idea mezclarlos y no lo vamos a hacer. A partir de ahí creemos que mucha gente puede sumar en la precampaña», dicen en el partido.
¿Qué gente? «Sobre todo dirigentes del PP que están gobernando. Nos interesa llevar la campaña al terreno de la gestión: Núñez Feijóo, Moreno Bonilla, Ayuso y Almeida. Son figuras que deben estar en nuestra campaña», dicen en el PP catalán.
Saben los populares que hay una amenaza que no es menor en esta campaña, la de Vox, pero quieren huir de ella y centrarse en la gobernanza.
Las encuestas —y los partidos— dan por seguro que Vox va a irrumpir en el Parlament con grupo propio (al menos 5 diputados). Ahí comienzan los nervios, pero la mayoría de voces del PP catalán son partidarios de encajar esta realidad y de no realizar demasiados movimientos bruscos. Opinan que hay que asumir que Vox va a entrar en el Parlament sí o sí y que no conviene entrar en una competición con los de Santiago Abascal.
El PP peleará el voto de Ciudadanos
«La gran oportunidad es el desmoronamiento de Ciudadanos. Ahí debe estar nuestra batalla. Debemos llevar la campaña a atraer a todos esos votantes que confiaron en las últimas elecciones en Cs y que ahora están decepcionados con un partido que se ha demostrado inútil», dicen.
¿Va a haber fichajes del PP en Ciudadanos? «No lo preveo. Por varias razones: la primera es porque consideramos que hay poco que fichar ahí. Solo se me ocurre solo un nombre. La segunda es las cosas están orientadas a hacer un equipo con gente de la casa», aseguran.
No quiere el PP volcar la campaña en el procés porque, recuerdan, salieron escaldados en las últimas elecciones de diciembre de 2017, un tiempo en que el partido bordeaba la desaparición en Cataluña.
El PP no quiere competir con Vox
«Necesitamos colocar en el debate el eje izquierda-derecha. Hay que hablar de educación, hay que hablar de okupación y de seguridad, y hay que hablar de economía, de autónomos y de impuestos. Si nos perdemos en quién es más español, le vamos a hacer la campaña a Vox. Debemos tener las cosas claras con esto», advierten en la sede de la calle Urgell.
Y a esto es a lo se está prestando Álvarez de Toledo, cómoda, aseguran en el PP catalán, con estos debates y con un discurso trabajado y sin complejos en estos temas.
Su papel puede ser sectorial porque ya se dedicó durante la campaña de las generales a pulsar la opinión de colectivos con dificultades para hacer su trabajo en Cataluña como jueces, magistrados, fiscales, policías, guardias civiles e incluso maestros.
A todos ellos trata de captar el PP, ahora que la alianza electoral con Cs ha desaparecido del mapa de posibilidades por completo. Ya se vislumbraba que así en ocurriría en mayo, tal y como publicó Economía Digital, y ahora se ha confirmado porque Inés Arrimadas se ha hartado de implorar.
Ciudadanos (36 diputados) intentará resistir en solitario fugas en todas las direcciones: hacia PSC, hacia PP y hacia Vox. No lo tiene sencillo porque no hay partido que no se friegue las manos pensando en el botín que le espera.