Cataluña planea retrasar el toque de queda antes del 9 de mayo
Los indicadores epidemiológicos muestran una ligera mejoría este domingo, mientras se reduce la presión en las UCI de los hospitales
Cataluña no esperará a que venza el actual estado de alarma para plantear una modificación sobre el toque de queda. La Generalitat estudiará antes del próximo 9 de mayo una flexibilización de sus restricciones que permitiría a los ciudadanos llegar a sus hogares más tarde de las 22:00 horas. El horario actual mantiene a la región como una de las autonomías con un plan más severo de medidas, frente a territorios como la Comunidad de Madrid donde se puede circular libremente hasta las 23:00 horas.
El secretario general de Salud de la Generalitar, Marc Ramentol, ha abierto la puerta a modificar en las próximas semanas la normativa del toque de queda para ofrecer algo de alivio a los ciudadanos, después de medio año sometidos a las restricciones de movilidad por las noches. «En el caso del toque de queda, somos conscientes de dos cosas. La primera es que es una medida eficaz; la segunda es que está afectando emocionalmente, especialmente a las capas más jóvenes de nuestra sociedad», ha justificado en una entrevista en Catalunya Ràdio.
Ramentol se ha mostrado a favor de someter esta medida excepcional a una «revisión constante» para adaptarla a los «requisitos epidemiológicos» de cada momento, lo que permitiría retrasar su horario si la curva epidemiológica comienza a descender de forma generalizada después del aluvión de casos que han sucedido a la Semana Santa.
El escenario está mucho más abierto después del 9 de mayo, cuando el estado de alarma finalizará después de seis meses en funcionamiento. El fin de este mecanismo constitucional devolverá la pelota a las autonomías que deberán recurrir a otro tipo de normativas sanitarias para poner en marcha medidas como los cierres perimetrales o el toque de queda. «Veremos si es una medida necesaria, y tendremos que ver qué adaptaciones regulatorias le pedimos al Estado».
En todo caso, el secretario general de Salud ha cargado con fuerza contra el Gobierno de Pedro Sánchez por haber comunicado a través de los medios de comunicación su decisión de no solicitar al Congreso una prórroga adicional del estado de alarma. «El 9 de mayo estaremos un poco mejor de lo que estamos ahora, pero la emergencia pandémica no habrá terminado», ha lamentado.
El avance de la pandemia da un respiro temporal a Cataluña
Las declaraciones optimistas de Ramentol se producen en un momento de retroceso de la pandemia. Los indicadores epidemiológicos han comenzado a retroceder después de dos semanas consecutivas empeorando como consecuencia del aluvión de contagios que se produjo después de la Semana Santa.
El principal síntoma de este cambio de tendencia es la reducción de la velocidad de propagación del virus (Rt) que este domingo ha caído seis centésimas hasta los 1,32 puntos. En todo caso, todavía está muy lejos del umbral que marca la entrada en una fase de reducción de la pandemia. También se ha minimizado el índice que mide el riesgo de rebrote (EPG) que ha regresado hasta los 346 puntos, lo que supone 12 menos que en la jornada anterior.
Paralelamente, las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) han logrado bajar por debajo de la barrera de los 500 pacientes críticos que obliga al sistema a reprogramar buena parte de las operaciones quirúrgicas de menor urgencia. La ocupación se ha quedado este domingo en 495. Son 12 camas libres más que el sábado.
Sin embargo, el incremento de las hospitalizaciones en planta anticipa que la fase de recuperación puede ser más lenta de lo previsto. El número de enfermos ingresados por coronavirus se ha elevado hasta los 1.679, que supone un incremento de 75 en apenas un día.
En las últimas 24 horas, las autoridades sanitarias han notificado 1.604 nuevos contagios y 17 fallecimientos como consecuencia de la Covid-19, según los datos del Departamento de Salud. El dato eleva la lista de víctimas mortales desde el inicio de la pandemia hasta las 21.663.