Cataluña eliminará el toque de queda tras el 9 de mayo
La Generalitat anuncia que sí estarán preparados para volver a implementar el toque de queda si la situación epidemiológica catalana lo permite
La consellera de la Presidencia de la Generalitat de Catalunya, Meritxell Budó, ha anunciado este lunes que, finalmente, Cataluña no prolongará el toque de queda tras el final del estado de alarma en España, que terminará el próximo 9 de mayo. Según la consellera, de hecho, no será necesario aplicar medidas excepcionales ya que “todo hace pensar que no sería necesario decretar medidas de este tipo”.
En una entrevista en el programa Cafè d’idees, la consellera ha destacado que habrá que tener muy presentes los índices que marcan la evolución epidemiológica y los resultados de la campaña de vacunación, que ha destacado como «muy importantes» en la valoración que hará la Generalitat para tomar una decisión final. Por el momento, no obstante, los datos llevan a pensar que no será necesario ampliar las restricciones previstas a partir del final del estado de alarma.
Dichas medidas limitan al 30% el aforo en el interior de bares y restaurantes y amplia su horario hasta las 23:00 horas. Además, este lunes está previsto que entre en vigor un decreto de modificación de las restricciones por el que se permitirá llevar a cabo asambleas de entidades deportivas con limitaciones de aforo de entre 500 o 1000 personas en función de si la ventilación garantiza la seguridad. Dichas concentraciones estarán siempre limitadas al 50% del aforo.
Sin toque de queda, pero preparados para implementarlo
A pesar de que el toque de queda era una de las medidas inherentemente relacionadas con el estado de alarma, la Generalitat ya investigó la semana pasada la vía judicial para poder mantenerlo en caso de necesidad. En este sentido, aunque Budó ha negado esta mañana que se prolongue, sí ha admitido que la Administración catalana estará preparada para volver a implementarlo si la situación sanitaria lo requiere.
Bajo esa misma idea, Budó ha anunciado que se han preparado para poder decretar medidas que suplan dicho toque de queda, una normativa que está programada para ser aprobada este próximo martes.
Se trata de un marco normativo que deberá contar con el beneplácito de la Justicia pero que posibilita al Govern a aplicar medidas restrictivas para las que, a priori, no tendría competencia, siendo el Gobierno central la autoridad para tomar dichas decisiones.
Respecto al confinamiento perimetral, la consellera se ha mostrado mucho más prudente y ha concretado que «se tiene que acabar de valorar». Para ello, ha añadido que se evaluará la situación de los sectores económicos más afectados, commo la restauración.