Cataluña reconoce más de 2.000 contagios en festivales después de avalar su celebración
El Govern también admite que los cribados previos fracasaron: casi 300 personas lograron sortear el dispositivo de seguridad y acceder al recinto habiendo dado positivo en el test de antígenos
La Generalitat de Catalunya calcula que 2.279 personas se contagiaron durante la celebración de los tres festivales que tuvieron lugar durante finales de junio y principios de julio y que contaron con el aval del Govern: el Canet Rock, celebrado en Canet de Mar; el Vida, en Vilanova y la Geltrú; y el Cruïlla, en Barcelona.
Según ha explicado este miércoles la secretaria de Salut Pública, Carmen Cabezas, esta cifra supone 842 positivos más de los esperables durante el periodo que duraron los eventos.
Se trata de «unos 800 casos extras en el marco de la quina ola, cuando teníamos 8.000 al día y muchos brotes, por lo que es una contribución más pero entre muchos factores», ha explicado. «Fue un factor mas, sí, pero no un hiperdiseminador«, aclara.
La Generalitat admite, además, que el cribado que los asistentes tuvieron que pasar para poder acceder al recinto, cuando tenían que superar un test de antígenos realizado in situ, no fue perfecto. De hecho, 271 personas lograron acceder a los recintos habiendo dado positivo en el test de antígenos.
Por otra parte, están los falsos negativos. Personas que, tal y como publicaron en redes sociales, comenzaron a encontrarse mal justo después del festival, pero cuyo test dio negativo y pudieron acceder al recinto. No obstante, lo más probable es que estuvieran contagiadas en una fase de incubación del virus.
Laxas medidas de seguridad
Otro de los elementos que permitió el contagio fue que no se respetaron las medidas de seguridad con respecto a la distancia social ni con el uso de la mascarilla.
Tal y como ha podido constatar Economía Digital a través de fotos publicadas en redes sociales, una significativa parte de los asistentes no llevaban puesta esta prenda y en los conciertos se formaron aglomeraciones en las que no se podía respetar los 1,5 metros reglamentarios marcados por las autoridades sanitarias.
La celebración de los festivales aunó a unas 100.000 personas en el momento en el que comenzaban los primeros macrobrotes como el originado en la isla de Mallorca, lo que suscitó el debate de si se debían cancelar dichos eventos.
Además, coincidió con el inicio de la propagación de la variante Delta en España, más contagiosa que las anteriores y que causó estragos en la India.
Cabezas, por su parte, ha admitido que los contagios han superado en un 76% los positivos previstos y esperados a raíz de estos festivales, con lo que se alinea con las palabras del conseller de Salut de la Generalitat, Josep Maria Argimon, quien opinó que fue un error permitir la celebración de estos encuentros.
Lo cierto es que los tres festivales contaban con el beneplácito del Plan de Protección Civil de Catalunya (Procicat) en un momento en el que Cataluña ya tenía tasas disparadas de contagios.