Cataluña aparca los test del Ministerio de Sanidad por poco fiables
La Generalitat para la distribución de los test serológicos fabricados por Wondfo hasta comprobar su porcentaje de error
La Generalitat de Cataluña ha parado la distribución de los test serológicos que le envió el Ministerio de Sanidad para la detención del covid-19 por considerarlos poco fiables. Estos test se repartieron en todas las comunidades españolas.
El Instituto Catalán de la Salud (ICS) ha comunicado a todos sus centros que “interrumpe la distribución” de los test y “desaconseja su utilización” hasta efectuar una nueva validación a causa del elevado número de errores detectados, según informa Nació Digital.
Se trata de test serológicos fabricados por la corporación china Guangzhou Wondfo Biotech. El ministerio de Salvador Illa les compró 5,5 millones de unidades. No trascendió el importe económico de la operación.
Tal como avanzó Economía Digital, el personal sanitario se quejó de estos test serológicos porque no confirman si se está en el inicio de la infección, en plena enfermedad o ya se ha superado. Solo indican si una persona ha generado anticuerpos.
Enric Vélez, médico de un centro de atención primaria de Barcelona, advirtió cuando se repartieron estos test serológicos que eran «inapropiados”. En el caso que el resultado sea positivo, “no permite saber si uno está pasando la enfermedad o ya la ha pasado, si todavía es infeccioso o ya no lo es”. En definitiva, no permiten saber si un sanitario todavía es un vector de transmisión de la enfermedad o ya puede regresar al trabajo. Para ello se requiere una prueba PCR.
Este test no discrimina los anticuerpos del tipo IgM, que aparecen al principio y durante la enfermedad, del IgG, que se generan cuando se ha superado la infección y dan inmunidad a largo plazo. Por lo tanto, no confirman si una persona ha superado la enfermedad o aún es contagiosa.
Además, el margen de error es elevadísimo. Aunque el Instituto Carles III les atribuyó una fiabilidad del 66,3%, las pruebas realizadas por las autoridades sanitarias catalanas situarían este porcentaje muy por debajo, aunque no han concretado la cifra.
Comunicado a los centros
En un mensaje enviado a los centros del ICS, su director gerente, Josep Maria Argimon, señala que “se están recopilando los datos obtenidos en algunos centros y hasta que no se pueda hacer una validación más precisa de estos test detendré la distribución”. Y advierte que “desaconsejo su utilización”, con la única excepción de efectuar las pruebas de validación.
No es la primera vez que el Ministerio de Sanidad queda en evidencia por la baja calidad del material sanitario adquirido a corporaciones chinas. Hace unas semanas, devolvió más de medido millón de test rápidos fabricados por Shenzhen Bioeasy Biotechnology, que ni siquiera tenía autorización para producir estas pruebas en su país.
El Ministerio de Sanidad ordenó este viernes la retirada de un lote de mascarillas del tipo FFP2 que repartió entre las comunidades autónomas después de comprobar que no cumplían con la normativa europea. Están fabricadas por Garry Galaxy, un proveedor chino al que se le adquirieron 900.000 unidades de diversos tipos, sin que se haya precisado aún el volumen que se ha retirado. Los sanitarios culpan al Gobierno de los contagios que sufren por las deficiencias del material de protección.