Casado rechaza la abstención técnica que pide Sánchez
Sánchez transmite a Casado la necesidad de un gobierno estable ante la sentencia del 1-O, pero el PP se instala en el "no" a los socialistas
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, se mantiene en el «no» a Pedro Sánchez, pese a la oferta lanzada por Albert Rivera este lunes de negociar una abstención en la investidura a cambio de que el potencial candidato socialista se comprometa a cumplir con tres condiciones durante la legislatura. Así lo ha trasladado el líder del PP al presidente del Gobierno en funciones.
Sánchez ha insistido en demandar al PP una abstención técnica en una investidura que ahora mismo no se sabe si tendrá lugar. Fuentes del PSOE han transmitido a los medios de comunicación que Casado se ha negado a apoyar por pasiva la investidura, pero desde la formación popular han explicado que no brindarán declaraciones hasta después de verse con el rey Felipe VI.
Los socialistas han utilizado la eventual sentencia del juicio del 1-O como una suerte de carnada para que el PP muerda el anzuelo. Sánchez, durante su llamada a Casado, según fuentes del PSOE, ha explicado que, ante el calendario catalán de previsibles protestas por la posible condena a los líderes independentistas, España necesita un gobierno estable, y se ofreció a proporcionarlo.
También ha argumentado la necesidad de estabilidad en el gobierno español con el desenlace del brexit el próximo mes de octubre. «Es importante tener un Gobierno estable con plenas capacidades», que «se ven mermadas si el Ejecutivo está en funciones», fue el mensaje que transmitió Sánchez a Casado, según fuentes del PSOE.
Un sector del PP critica la oferta de Rivera
Desde el PP han confirmado que la llamada con Sánchez tuvo lugar y que fue «cordial», pero poco más. De rechazar Casado una abstención en la investidura de Sánchez, estaría también dando la espalda a Rivera, que este lunes apuró una «solución de Estado» para facilitar la votación en el Congreso y evitar una repetición electoral el próximo 10 de noviembre.
El «no» de Casado a Sánchez ha sido interpretado así por los socialistas: «Por lo tanto, rechaza apoyar un Gobierno estable en España y evitar con ello una repetición electoral». No obstante, desde este lunes también han resonado voces populares contrarias a la propuesta de Rivera, por lo que está claro que el asunto tiene opiniones encontradas en la formación de Casado.
Un sector del PP ha tildado de electoralista la propuesta de Rivera y le han acusado de estar «desesperado» por la caída de Ciudadanos en las encuestas. Se ha «quedado fuera de juego» y se sitúa «a la baja en todas las encuestas», criticaron fuentes del PP este lunes, mismo día en que Rivera y Casado se han reunido para estudiar la abstención.
El rey Felipe VI ha celebrado su primera jornada de consultas con los partidos este lunes, en la que participaron las formaciones minoritarias con representación parlamentaria. Este martes es el turno del PP, Ciudadanos, PSOE, Podemos, los comunes y Vox.