Casado busca candidato para relegar a Bonig en el PP valenciano en otoño
La formación conservadora necesita un impulso en su principal bastión y algunos dirigentes piensan que el presidente de la Diputación de Alicante podría ser un buen sustituto para Bonig.
El «nuevo Partido Popular» de Pablo Casado busca este año «limpiar» el partido a través de los congresos que está celebrando por toda España. Este año y el que viene son decisivos para la nueva etapa de los populares que buscan dar un ‘golpe de efecto’ «llevando a la ciudadanía al centro», tal y como explicó su líder, Pablo Casado, en su última intervención junto al ex presidente José María Aznar.
Los recientes ‘cónclaves’ en Andalucía están acaparando las portadas sobre las revueltas de algunas direcciones regionales con los ‘dedazos’ de algunos candidatos impuestos directamente por Génova. Mientras otras provincias hacen nervios y calientan por la banda con supuestos ‘dimes y diretes’. Este es el PP de Valencia.
La presidenta regional Isabel Bonig no las tiene todas consigo, a pesar de contar a los suyos que tiene la venia de la dirección nacional para seguir presentándose. Los nervios afloran en la federación.
Bonig no apoyó a Casado en el Congreso Nacional para ser líder del PP. La valenciana se decantó por Soraya Sáenz de Santamaría, al igual que el presidente castellanoleonés Alfonso Fernández Mañueco, quien ha recibido últimamente el respaldo de la dirección nacional.
Carlos Mazón, posible rival de Bonig
Sin embargo, cunden los nervios de cara al congreso regional y los rumores del PP valenciano se concretan con el apoyo de algunos cargos nacionales a otra figura que no es Bonig para Valencia. Se trata, según ha podido saber Economía Digital, del presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón.
«Mazón podría ser una posibilidad, pero la decisión ni está hablada ni está tomada», señala un cargo autorizado de la dirección nacional. Tampoco está fijada la fecha del ‘cónclave’ que, según los estatutos, se celebrará después del verano y antes que finalice el año.
Mazón es el nombre que algunos populares agitan para que Casado sustituya a Bonig. Mentor de Eduardo Zaplana y cercano al secretario general y número dos del partido, Teodoro García Egea, Mazón se mueve con pies de plomo en el complejo equilibrio de familias conforma el PP valenciano.
Por un lado, procura figurar estas semanas en los medios y sitúa su agenda entre Alicante y Valencia, pero a su vez, guarda la ropa profesando gran respeto por Bonig, con quien habla a menudo, según ha señalado el propio Mazón en incontables ocasiones.
El dirigente provincial ya descartó el pasado diciembre dar el salto ante la lejanía de los ‘cónclaves’ y para mantener la calma entre los suyos. Su salto le obligaría a abandonar la Diputación de Alicante, un puesto importante y de gran visibilidad para el dirigente, por lo que tendría que tener muy atado sus apoyos.
Casado tiene que pensar muy bien a quién da su bendición para capitanear el principal bastión de los populares, de ahí salieron casi 584.000 votos, más del 10%, de los 5,1 millones que el PP obtuvo en las generales de abril de 2019, solo superados por las papeletas recogidas en Madrid y Andalucía, dos territorios clave presididos por dirigentes populares.
Fuentes de la dirección nacional se muestran seguras de recuperar el voto perdido a Vox y Cs en Valencia de cara a los próximos comicios.
La opinión creciente en Génova es que la formación conservadora necesita un nuevo impulso en la Comunidad Valenciana y lo que en ambos bastiones -Madrid y Valencia- pretenden evitar es abrir la contienda de las primarias entre dos candidatos. Algo difícil si Casado no arropa a Bonig.