Caos en la construcción en la vuelta al trabajo
La limitación del Gobierno de las obras que se pueden retomar a partir de este lunes complica la vuelta a la normalidad en sectores como la construcción
Miles de ciudadanos vuelven este lunes al trabajo tras el levantamiento de las restricciones de las actividades no esenciales decretadas ante la epidemia de coronavirus. Entre algunos de los sectores implicados se encuentran la producción industrial o la construcción.
No obstante, el Gobierno complicó que se retomen con normalidad esta última actividad. El Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez publicó a última hora de este domingo un decreto en el que limita las obras que se pueden reanudar, impidiendo que se continúen las que se realizan en edificios de viviendas. Algo que provocó las críticas de sindicatos como CCOO.
En el decreto se justifica que «la concentración de personas en edificios en los que se están desarrollando determinadas obras de intervención» determina un incremento del riesgo de contagio, por lo que se procede a «suspender» su reanudación. Seguirán prohibidas aquellas que se realicen en lugares transitados por personas de forma «temporal o permanente».
El secretario general, Unai Sordo, criticó este domingo el desescalaje del confinamiento. «Ningún centro de trabajo que no pueda garantizar los protocolos de seguridad debe retomar la actividad», aseguró.
La suspensión se extenderá mientras dure el periodo de alarma. Se excluyen aquellas obras que puedan ser separadas dentro del inmueble y que no impliquen la circulación de trabajadores y materiales por zonas de tránsito vecinal. También las que tengan por finalidad hacer reparaciones urgentes de instalaciones o averías, que sí podrán ser reanudadas desde este lunes.
¿Qué medidas se mantienen?
Desde este lunes, las únicas limitaciones a la actividad son las recogidas en al decreto de estado de alarma inicial, del 14 de marzo. Por tanto, se permiten actividades sanitarias, de seguridad y telecomunicaciones, de aduanas, de suministro y distribución de alimentos así como productos de primera necesidad, el suministro eléctrico y de petróleo y gas natural.
También los servicios de empresas e industrias auxiliares, como componentes, limpieza, vigilancia y seguridad, entre otros. Se ha aumentado la protección en los transportes públicos, con agentes de Policía repartiendo mascarillas entre los usuarios.
La Justicia y todos los servicios ligados siguen activos. No así la apertura de bares y otros establecimientos de restauración, que continuarán cerrados hasta una nueva fase.