Calviño justifica los indultos: «Todo el mundo puede cometer errores, nuestra voluntad es la concordia»

En pleno debate sobre los indultos a los independentistas catalanes y a la espera de que el Tribunal Supremo emita su informe preceptivo para que el Ministerio de Justicia tramite los expedientes, desde el Gobierno se afanan por allanar el terreno ensalzando la voluntad y la conveniencia de apostar por «el diálogo y la concordia».

“Todo el mundo puede cometer errores, pero nuestra voluntad es muy clara (diálogo y concordia), y es la que vamos a seguir teniendo el resto de la legislatura porque para eso nos pagan”, ha sostenido la vicepresidenta segunda y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño. 

Calviño ha defendido, en una entrevista en Cope recogida por Economía Digital, que el Ejecutivo se guía “desde el principio” por responder al “interés general”, también en este asunto, y hacer “lo mejor aunque sea impopular”. De hecho, ha asegurado que el Gobierno ha tenido que tomar “decisiones muy difíciles que ningún Gobierno querría tener que tomar”. 

En este sentido, ha negado que los posibles indultos se deban a un interés político para que el Ejecutivo mantenga sus apoyos parlamentarios. “No es precisamente la conveniencia política la que nos guía, sino tratar en cada momento lo que es mejor para la sociedad española”, ha enfatizado. 

“No  podemos retomar el camino de la crispación y el enfrentamiento” 

Para Calviño hay que trabajar para evitar las “fórmulas fallidas” que llevaron hace ya más de tres años a la tensión social y la ruptura ante el “fracaso” del referéndum ilegal de independencia el 1 de octubre de 2017 y la ulterior declaración unilateral de independencia.

La vicepresidenta ha desvelado que le costó “mucho” explicar fuera de España las escenas “incomprensibles” que se registraron por aquel entonces en el país y que no olvidará “nunca” el “grado de crispación” vivido en el primer Consejo de Ministros del Gobierno socialista de Pedro Sánchez el 21 de diciembre de 2018 en Barcelona. 

Por ello, ha insistido en que no se puede retomar el camino de la “crispación y el enfrentamiento”, ya que desde entonces considera que se ha conseguido “rebajar el tono, reducir la crispación y recuperar el diálogo y la concordia un poco en la sociedad catalana”, y reivindica por continuar en esa línea.

“Apuesto por el diálogo y la concordia y no por volver al enfrentamiento, que ya hemos visto que no nos llevan a nada más que al fracaso”, ha apostillado. 

Insta a encontrar «soluciones»

Ante la posibilidad de que se produzcan los indultos y se repitan los intentos de volver a celebrar un referéndum o declarar la independencia de Cataluña, Calviño ha apuntado que hay que encontrar “soluciones” para evitar una repetición de lo vivido hace algo más de tres años y evitar volver a la situación “indeseable” del pasado para el conjunto de ciudadanos. 

“Queremos una buena inserción y convivencia del conjunto de la sociedad española”, ha remarcado Calviño, quien ha evitado valorar cuál debería ser la reacción del Gobierno si se repitieran acontecimientos similares a los de 2017 tras los indultos, ya que “se tratarán las distintas decisiones cuando se pongan sobre la mesa”. 

La vicepresidenta segunda del Gobierno ha evitado opinar sobre la posibilidad de negociar un concierto económico con Cataluña similar al que disfrutan en País Vasco y Navarra y se ha limitado a apuntar que la reforma del sistema de financiación autonómica habrá que «abordarla con el conjunto de las comunidades autónomas».