Calviño defiende el viaje de Albares a Bruselas para reconducir la relación con Argelia
La ministra confía en que la relación con Argelia pueda reconducirse y que el país magrebí dé "marcha atrás" en su posición con España
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Tranformación Digital, Nadia Calviño, ha defendido este viernes el viaje del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, a Bruselas para reconducir la situación con Argelia.
En esta línea, ha recordado que la relaciones comerciales «no son nacionales, son europeas» y, por lo tanto, considera que es «muy lógico» el viaje del ministro a Bruselas.
En una entrevista en la TVG, Calviño ha lamentado la reacción de Argelia de congelar el comercio con España, pero confía en la que la situación pueda «reconducirse» y el país magrebí «dé marcha atrás» en su decisión.
«Lamento esta dinámica, que no es positiva»
Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Tranformación Digital
«Es muy lamentable que ha hayamos visto esta reacción por parte de uno de nuestros vecinos con los que tenemos que tener una relación extraordinaria, excelente», ha remarcado Calviño.
Por parte de España, ha dicho que están dispuestos a «reconducir» esta situación y ha recordado que el portavoz de la Comisión europea fue ayer «muy claro» con Argelia al pedirle que reconsidere su posición para volver a una relación como la que tenían hasta ahora. «Lamento esta dinámica, que no es positiva», ha insistido la vicepresidenta.
Defiende una buena relación con Marruecos y Argelia
Al ser preguntada sobre si era necesario abrir ahora este frente al cambiar el criterio de España sobre el Sáhara Occidental, ha respondido que es necesario tener una relación «excelente» con todos los vecinos y «a nadie se le escapa que donde tenemos la frontera sur de Europa es en Marruecos» y, por tanto, hay que tener una buena relación tanto con este país como con Argelia.
En este sentido, ha recalcado que este es el «equilibro» que España ha mantenido y va a seguir manteniendo, además de defender que hay que «intentar resolver» frentes abiertos desde hace más de 40 años como el del Sáhara