Bruselas justifica su retraso con la vacuna: «No estamos perdiendo el tiempo»
El presidente de la Comisión Europea, Charles Michel, da un espaldarazo a la revisión de la vacuna de la Agencia Europea del Medicamento
Seis grandes potencias internacionales han dado ya luz verde a la comercialización de la vacuna contra el coronavirus que ha diseñado la farmacéutica estadounidense Pfizer. Un proceso que la Unión Europea ha retrasado al menos hasta finales de diciembre para garantizar la comprobación de todos los datos, pero que ha colocado a los estados miembro por detrás en la carrera internacional para iniciar las campañas de vacunación.
Mientras que Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, México, Arabia Saudí o Bahréin ya han dado sus primeros pasos para lograr la inmunización de su población, Bruselas sigue justificando la demora por los exhaustivos exámenes de la Agencia Europea del Medicamento (EMA). «No estamos perdiendo el tiempo», ha asegurado el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en una entrevista con la radio France Inter.
El máximo responsable del órgano de gobierno de la Unión Europea ha dado un espaldarazo a los reguladores sanitarios europeos que se están encargando de revisar los datos de los ensayos clínicos con humanos. Por eso, ha hecho un llamamiento para “no jugar” con la aprobación del antígeno.
«Los organismos de salud están analizando decenas de miles de páginas de datos científicos para garantizar que, sobre la base de los ensayos realizados, podamos poner con confianza las vacunas a disposición de los ciudadanos», ha ensalzado.
Los retrasos dejan en el aire las campañas de vacunación en Europa
La decisión de la Agencia Europea del Medicamento marcará el inició de las campañas de vacunación de todos los países del viejo continente que han formado parte de la estrategia conjunta de adquisición de vacunas. España, por ejemplo, no iniciará las inyecciones de los colectivos más vulnerables hasta que el organismo apruebe su comercialización.
Los reguladores europeos tienen previsto ofrecer un resultado definitivo sobre la eficacia del antígeno de Pzifer el próximo 29 de diciembre, lo que podría dar el pistoletazo de salida para que los países miembro inicien sus vacunaciones ya en la primera semana de enero. La siguiente aprobación marcada en el calendario es la de Moderna que se definirá previsiblemente el 12 de enero.
«Es fácil decirlo, vamos a iniciar campañas de vacunación, es más difícil lograr implementar estas campañas de vacunación», ha indicado Michel.
Aunque la aprobación de la vacuna será simultánea para todos los estados europeos, las campañas de vacunación sí que llevarán caminos distintos. Cada uno de los países ha tenido capacidad para elaborar su propia lista de los grupos prioritarios que recibirán antes las inyecciones, en función de criterios científicos o bioéticos.
La logística del suministro también será distinta. España ha decidido dejar el peso de las vacunaciones en los 13.000 centros de atención primaria, mientras que otros gobiernos han creado sus propias redes sanitarias. Alemania, por ejemplo, ha habilitado 60 centros específicos de vacunación e Italia instalará unas grandes carpas en las plazas públicas para administrar las inyecciones a los ciudadanos.