Botella a ‘Telva’: “Lo que me importa es estar tranquila conmigo misma”

La Alcaldesa de Madrid, Ana Botella (PP), ha concedido una entrevista exclusiva a la revista Telva en la que hace una valoración de su primer año de mandato. Aunque el cuestionario se realizó antes de la noche en la que cuatro menores perdieron la vida en el recinto municipal Madrid-Arena, el equipo de comunicación de la política conservadora no ha logrado evitar su publicación tras negarse a actualizarla con preguntas sobre la tragedia.

Curiosamente, el Vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva (PP), uno de los hombres sobre los que se centran los focos de la investigación, no aparece en ninguna de las instantáneas del amplio reportaje fotográfico que acompaña las declaraciones de la también esposa del ex presidente del gobierno, José María Aznar. Con ella posan la Delegada de Hacienda y Administración Pública, Concepción Dancausa (PP), el Delegado de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad, Antonio de Guindos (PP) y la Delegada de Familia y Servicios Sociales, Lola Navarro (PP). Éste fue, precisamente, el cargo que Botella ocupó antes de ascender a la alcaldía. En todo el reportaje no hay ni una sola mención a la ex presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre.

Juegos Olímpicos

El reportaje evidencia el cambio de estrategia de comunicación que Botella ha dado desde los incidentes de la noche de Todos los Santos. Tras la crisis, no ha concedido ninguna entrevista y sólo ha comparecido ante los periodistas sin admitir preguntas. Aunque Telva no ha podido preguntar sobre la tragedia, la autora de la entrevista si se interesó por cómo encaja Botella las críticas sobre su gestión. “Me preocupa estar tranquila conmigo misma y acertar en la gestión para mejorar la vida de los ciudadanos”, asegura a la periodista Cristina Larraondo. La alcaldesa, como su antecesor en el cargo, el actual Ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón (PP), mantendrá el empeño en lograr los Juegos Olímpicos.

“Lo que le queda al proyecto olímpico son alrededor de 2.000 millones a dividir entre tres admnistraciones durante ocho años. Nos vendría muy bien (···) Londres acaba de anunciar que ha salido de la recesión”. Sin embargo, preguntada por las grandes infraestructuras impulsadas en los mandatos de Gallardón, la primera edil asegura que “lo que toca ahora es mantener lo que hemos hecho, que tiene un coste muy elevado”. Botella admite que le gustaría unir el aeropuerto –“la principal industria de la ciudad”, dice— con el AVE.

«Fabrica de parados»

En el reportaje de valoración de su primer año como alcaldesa, Botella reconoce pocos errores. Ni siquiera admite malestar por la subida del impuesto de bienes inmuebles (IBI) o el aumento del horario de aparcamiento. “Siempre he recibido mucho cariño de la gente, pero lo que ahora me transmiten los que se me acercan es una gran preocupación por la situación en la que nos encontramos. Noto mucha diferencia respecto a 1996 (···). Mi marido heredó un altísimo nivel de paro, porque los socialistas son una fabrica de parados, pero ahora sufrimos una crisis institucional que antes no existía”.

Echa mano también de los socialistas para justificar al actual Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (PP): “Está tomando medidas distintas a las que prometió porque el PSOE siempre ha dejado una situación que luego ha habido que arreglar”. Y sobre la situación de Catalunya, Botella declara a Telva que “la unidad de España está garantizada por la Constitución”. La entrevista hace una aproximación al ámbito privado y se detiene en el ex presidente Aznar. Su mujer asegura que “José Mari y yo nos hemos tenido que reinventar muchas veces: sabemos bien lo que es llegar e irse del poder”.

El precedente de ‘Vogue‘

El reportaje de Ana Botella en Telva tiene muchas similitudes estéticas y periodísticas al que en 2004 protagonizaron las ministras del primer gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) en Vogue, competidora de Telva. La polémica fue mayúscula y el reportaje muy criticado por Rajoy. «A lo largo de estos meses hemos visto muchos gestos. Y de los gestos hemos pasado, lisa y llanamente, al ridículo”. Para el líder del PP aquello estaba «absolutamente fuera de lugar» era «muy poco serio» y demostraba «cómo se toman las cosas en el Gobierno».

Decía Rajoy que una de las obligaciones de las ministras es «no hacer el ridículo» y consideraba «lamentable e impropio» que en Moncloa «se coloquen unos sofás y vaya una revista a hacer un reportaje a unas señoras muy bien vestidas, bien peinadas y maquilladas».