Borrell fracasa con su golpe judicial contra Torra y Puigdemont
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña desestima la petición de Borrell del cierre cautelar de las "embajadas" de Torra y Puigdemont
La ofensiva del Gobierno contra las embajadas de la Generalitat fracasa, de momento. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) desestimó este lunes la petición del Ministerio de Exteriores, dirigido por Josep Borrell, para cerrar cautelarmente las delegaciones del Govern de Quim Torra, un aparato paradiplomático potenciado también por Carles Puigdemont.
En un auto de la Sala Contenciosa del tribunal se revela que fue rechazada la petición de medidas cautelares solicitadas por Exteriores a través de la Abogacía del Estado, que reclamaba la suspensión del decreto 126/2018 (por el que se crearon las delegaciones) para la paralización de la actividad de las «embajadas catalanas» en Alemania, Londres y Ginebra.
La sección quinta de la sala concluyó que la solicitud del departamento de Borrell es «extemporánea» porque no fue planteada en la fase procesal que correspondía. Exteriores reclamó paralizar la actividad de las delegaciones al entender que están realizando «con singular intensidad» labores en favor de la causa independentista.
El TSJC matiza que la resolución no entra a examinar el fondo de la demanda de Exteriores, sino que únicamente responde a la petición de medicas cautelares desestimada por las razones aludidas, según recogen Europa Press y Efe.
Un punto para Torra y Puigdemont contra Borrell
Con este auto se frustran los planes de Exteriores y la Abogacía del Estado, que buscaban cerrar inmediatamente las tres delegaciones de la Generalitat por vía judicial. La reclamación fue presentada al inicio de julio y se esperaba una resolución en breve, que tardó cuatro semanas en concretarse, a favor del Govern que dirige Torra, el vicario de Puigdemont.
El departamento de Borrell cree que estas delegaciones persiguen un fin inconstitucional como es la «creación de una estructura de Estado» al servicio del independentismo y afea que las «embajadas catalanas» invaden las competencias exclusivas del Estado.
Ya el Tribunal de Cuentas reveló que las delegaciones de la Generalitat en el extranjero utilizaron fondos públicos para difundir el procés. Se trata de más de 27 millones de euros que fueron utilizadas por las «embajadas» en otros países entre 2011 y 2017, coincidiendo con los mandatos de Puigdemont y Artur Mas.
En su petición, la Abogacía del Estado afirmó que las delegaciones «se encuentran en funcionamiento y contraviniendo de forma evidente con su actividad entre otros, un título competencial y exclusivo del Estado, como las relaciones internacionales, como límite de la acción exterior de las comunidades autónomas».
Las mismas «embajadas» fueron objeto de «espionaje» por parte de Exteriores, desde el punto de vista de Torra y Puigdemont, que lanzaron a raíz de estas acusaciones una cruzada contra el ministro Borrell en Europa.
Borrell estudia recurrir
El Ministerio de Asuntos Exteriores informó este lunes de que estudia la posibilidad de recurrir la decisión del TSJC, según fuentes del departamento consultadas por Efe. También apuntaron que la decisión «no entra en el fondo» de si las oficinas deben ser cerradas, sino que «solo valora una cuestión procedimental».
«Analizamos todas las opciones, entre ellas, la de recurrir», dijeron desde Exteriores, que desde luego informará pertinentemente cuál será su reacción oficial al auto del tribunal catalán.