Batalla campal en Junts por la vicepresidencia, Economía y Acción Exterior
Jordi Sànchez no quiere a Josep Rius, hombre de Puigdemont, al frente de Acción Exterior. El secretario general busca a hombres de su confianza para evitar el descontrol del 'ala dura' de Junts al frente del Govern.
La vicepresidenta de Junts, Elsa Artadi, ha destapado la ‘caja de los truenos’ en el partido. La investidura de Pere Aragonès dará paso a horas de negociación este fin de semana para culminar la formación del Govern. El baile de nombres y de consejerías por parte de Junts sigue abierto y fuentes internas hablan de verdadera «batalla campal» entre los fieles al secretario general, Jordi Sànchez, y el ‘ala dura’ de Carles Puigdemont.
Todo saltó por los aires la semana pasada. Elsa Artadi retocó el documento final que Sànchez prometió entregar a Aragonès para formar Govern y ERC dinamitó las negociaciones. El texto no tenía nada que ver con lo que el secretario general de Junts había prometido al republicano y la noticia de la ruptura le pilló por sorpresa en Lledoners. No entendía nada.
El ‘ala Puigdemontista’ busca una voladura no controlada con el Gobierno central, mientras que ERC pide una ‘tregua’ de dos años para vislumbrar bien el camino hacia la unilateralidad. La figura y la palabra de Sànchez inspiran más confianza en Aragonès que las de Puigdemont o ahora Artadi, quien se ha retirado de la vicepresidencia económica tras acusaciones de «traidora» por una parte de su partido.
Los nombres y consejerías se suceden en Junts y en algunas ocasiones, la puja parece más un mercado persa. Fuentes conocedoras aseguran que el consejero de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Ramón Tremosa, se habría ofrecido para sustituir a Artadi al frente de la cartera económica. Mientras Sànchez rechaza su oferta porque no es de su confianza y busca un perfil más potente. También se discute si Economía y Vicepresidencia estarán ligadas, como habían propuesto hasta ahora.
El consejero de Políticas Digitales y Administración Pública de la Generalitat, Jordi Puigneró, sí que encajaría como vicepresidente, al formar parte del círculo de Sànchez.
Sin duda, la batalla por aplicar mayor o menor radicalidad desde las consejerías se impone en el nuevo planteamiento de formar Govern y ahí están la esencia de Junts en estos momentos, eres del ‘ala dura’ o de los cercanos a los republicanos.
Siempre existen dudas y círculos, pero aquí no hace falta preguntar eso que dicen en el anuncio: «¿Y tú de quién eres?» porque cada uno sabe de dónde procede -ideológicamente hablando-.
Se prevé un fin de semana movido en las filas de Junts con los republicanos a la espera de consensuar los nuevos cambios para anunciarlos tras la toma de posesión de Aragonès, lunes o martes.
Un perfil más blando para Acción Exterior
Una de las mayores disputas en estos momentos en la consejería de Acción Exterior. El sector cercano a Sànchez desaconseja colocar a Josep Rius, precisamente, porque es muy cercano a Carles Puigdemont. La internacionalización del conflicto originó no pocos problemas a los políticos presos y nadie en ERC quiere que se vuelva a repetir la historia. Tampoco en el Gobierno central.
Tal y como publicó Economía Digital, ministros del PSOE advierten, en especial, del “peligro” que tiene la formación de Carles Puigdemont, de nuevo al frente de la Acción Exterior de la Generalitat.
Fuentes del Gobierno recuerdan que la Justicia ya tuvo que suspender el Plan de Acción Exterior de la Generalitat en 2019 por conflicto de competencias en materias de relaciones exteriores y de política internacional que no le correspondieron y, según han desvelado fuentes gubernamentales a ED, temen que la historia se vuelva a repetir. Exteriores deberá seguir con la política del in vigilando a la Generalitat sobre el discurso que tendrá en la UE.
A esto se suma que el Tribunal de Instrucción número 18 de Barcelona mantiene una investigación abierta contra diez personas por presuntamente cometer un delito de malversación de fondos públicos en la acción exterior del Govern entre 2011 y 2017.
Algunos de los investigados son altos cargos del Govern como el ex consejero de Exteriores Raül Romeva, el ex secretario general del Diplocat Albert Royo, el todavía secretario del Govern, Víctor Culell, por presuntamente malversar fondos públicos para “internacionalizar” el procés. Los otros siete investigados son Roger Albinyana, Teresa Prohías, Aleix Villatoro, Roser Clavell, Manuel José Vila, Gerard Martí Figueras y Antoni Reig.
En paralelo, el Tribunal de Cuentas citó hace dos semanas para el 29 de junio a una cuarentena de ex altos cargos de los ejecutivos de Carles Puigdemont y Artur Mas para reclamarles fianzas millonarias por la acción exterior de la Generalitat.
Este informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas calcula, contando entidades públicas como el Diplocat, que durante los años del ‘procés’ se dieron irregularidades por valor de 7,3 millones de euros en adjudicaciones y contrataciones relacionadas con la promoción soberanista.
Ante esto y todavía con la causa sobre Carles Puigdemont abierta, en Waterloo y con Bruselas mirando, algunos ministros contemplan con miedo que ERC haya dejado la cartera de Exteriores en manos de Junts.