Barones y diputados del PSOE abren fuego contra Sánchez por los indultos
El profundo malestar se debe a que su discurso de "concordia" y "convivencia" a favor de indultar a los políticos presos "se opone a todo lo que venimos defendiendo", señalan los críticos.
El discurso de Pedro Sánchez sobre los indultos a los presos del procés ha desatado una enorme tensión en el Partido Socialista. Barones territoriales, diputados, cuadros medios e, incluso, las bases se posicionan en contra de conceder esta medida de gracia a los presos del 1-O y, según ha podido saber Economía Digital, animan a «plantar cara» a su secretario general para que ni el Gobierno ni el partido adopten el actual discurso de «revancha» y «venganza». «Este discurso nos mata», lamentan.
El Gobierno de Pedro Sánchez siembra dudas en Ferraz y en el PSOE en general. Todos saben que la figura del indulto es un «futurible», pero ningún dirigente territorial, ni diputado sabe lo que pasa por la cabeza del presidente en estos momentos.
El profundo malestar se debe a que su discurso de «concordia» y «convivencia» a favor de indultar a los políticos presos «está dañando al partido», explican los críticos. Entre otras razones porque «se opone a todo lo que hemos venido defendiendo hasta ahora», continúan.
Hasta conocer de primera mano si la intención de Sánchez apunta en la dirección del indulto, barones, diputados y dirigentes guardan silencio en público y se confabulan en privado para echarse a un lado del discurso posibilista con el que se ha presentado el Ejecutivo esta semana.
Page, Lambán, Vara, Díaz…
Los principales barones y las voces más críticas se alejan de los micrófonos y cámaras estos días porque consideran que la aplicación de la figura del indulto resultará contraproducente para sus territorios. El mero hecho de plantar cara a Sánchez en una batalla que todavía no es real también supone «cierto desgaste gratuito» que no van a consentir, apunta uno de ellos. «Sánchez verá», zanja esta voz.
El PSOE de Castilla-La Mancha sostuvo este miércoles que la opinión del secretario general de los socialistas en la región, Emiliano García-Page, sobre la posibilidad de que el Gobierno central conceda indultos a los líderes del procés es «clara y nítida»: «No estamos de acuerdo». La vicesecretaria del PSOE de Toledo, Esther Padilla, animó a los periodistas a «meterse en Google» porque el punto de vista del presidente castellanomanchego «sigue siendo el misma», recalcó.
«España no debe pagar ningún peaje más a los independentistas. Los partidos soberanistas no son ejemplo de estabilidad y certidumbre, sino al contrario. Y ya no pueden echar la culpa a nadie del caos en el que se han instalado porque es responsabilidad exclusiva suya. Están en un callejón sin salida y se están autoinfligiendo el dolor que no admitimos que nos inflijan a los demás. Los indultos políticos son del todo inaceptables y no cambio de posición. El indulto no puede ser objeto del mercadeo político», dijo García-Page hace diez días en una entrevista en La Razón.
El líder del PSOE de Aragón, Javier Lambán, aseguró la semana pasada que «para que se conceda un indulto a alguien es preciso que se arrepienta, y estos señores no solo no se han arrepentido sino que han dicho que cuando puedan lo volverán a repetir«. Desde el entorno de Lambán aseguran a ED que el dirigente «no ha cambiado su postura» respecto a las palabras del Ejecutivo.
La última vez que el presidente de Extremadura, el socialista Guillermo Fernández Vara, tomó la palabra para hablar sobre indultos utilizó la vía pragmática para añadir que le «hubiera gustado que las cosas fueron de otra manera desde el principio, pero no es posible».
Ya en 2018 señaló que «es una falta de respeto absoluta a la Justicia hablar de indultos», cuando todavía no existía las condena a los 12 presos. Desde su entorno reconocen ahora que existe «cierta preocupación» por «el clima» y «cómo se está desarrollando todo» respecto a Cataluña.
Por su parte, los candidatos a las primarias del PSOE en Andalucía no quiere ni oír hablar sobre el tema. Son conscientes de que un posicionamiento, mal gesto o guiño podría arruinar en cuestión de minutos el ganar la secretaría general andaluza y prefieren guardar silencio. El portavoz del PSOE en el Parlamento de Andalucía, José Fiscal, comentó este miércoles que «cuando el Gobierno adopte la decisión, entonces hablaremos».
Eso sí, el rival directo de Susana Díaz y ‘dedazo’ de Ferraz para ganar a la lideresa, Juan Espadas, apostilla: «Confío en el criterio del Consejo de Ministros y del presidente».
Fuentes del partido en Andalucía también transmiten «mucha preocupación» por los planes de Sánchez desde el entorno de Díaz y sobre la posible concesión de esta medida de gracia «a quienes no dan muestras de arrepentirse», sostienen.
Algunos diputados no entienden el discurso
Diputados del PSOE y cuadros medios tampoco entienden este discurso que apela a la «concordia» si «todavía no hay una decisión tomada». El giro que ha dado Sánchez no es comprensible para muchos.
De prometer en octubre de 2019 que los presos del 1-O cumplirán íntegras sus penas a «hay un tiempo para el castigo y otro para la concordia» hay mucho camino que a algunos socialistas no les han explicado, fuera del argumentario, sostienen.
Entre bambalinas, estos diputados dan la razón al Supremo asegurando que los líderes del procés «no han mostrado arrepentimiento» para que el Gobierno les conceda esta medida de gracia. «No podemos quedarnos en el inmovilismo y más con Cataluña», aseguran fuentes socialistas, pero tampoco tienen claro si el indulto sea el «gesto» adecuado por la «factura electoral» que después eso pueda pasar al PSOE.
Tal y como publicó Economía Digital, ni en Moncloa se ponen de acuerdo y es que algunos miembros del Gobierno estarían en contra de aplicar esta figura y sí de modificar el Código Penal para conseguir, de facto, la salida de los 12 condenados por el 1-O de prisión. Una vía alternativa menos lesiva que la del indulto.
Zapatero, Colau y los socios de investidura, a favor
Sin embargo, también hay principales dirigentes que arropan a Sánchez respecto a su discurso. El ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero se ha declarado este miércoles «partidario de los indultos» si el Ejecutivo central piensa que con ellos se podría «contribuir en una primera etapa al reencuentro» con Cataluña.
Zapatero señaló, en una entrevista en Canal Sur, que «si el Gobierno de España cree, piensa, que los indultos suponen un paso importante para olvidar lo que representó el octubre de 2017; para fortalecer el diálogo imprescindible con las instituciones catalanas, y para contribuir en una primera etapa al reencuentro, la decisión será favorable», dijo agregando que «esa es la reflexión que hay que hacer».
Por su parte, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, celebró este miércoles que el Ejecutivo «dé señales inequívocas» de que los indultos a los condenados por el procés «son inminentes» y añade que no serán «suficientes» para solucionar la crisis catalana.
Colau anima al jefe del Ejecutivo a ignorar las críticas del PP y perseverar en su «hoja de ruta». «Lo que tiene que hacer es mantener la hoja de ruta y liderar una nueva etapa», recalcó. No obstante, la catalana admitió que los indultos «no son la única solución», pero sí «un paso previo para iniciar una nueva etapa de desjudicialización».
Colau piensa que los indultos serán «un paso previo para empezar la mesa del diálogo en serio, que se pueda hablar de todo y avanzar hacia alguna propuesta que pueda ser votada», tal y como buscan los independentistas que ya cuentan con el apoyo de los socios de Gobierno, Unidas Podemos.
A este discurso se añaden los socios de investidura de Sánchez, Más Madrid, Compromís, PNV y Bildu sugieren hacer más «pedagogía» y se muestran de acuerdo en que «la ciudadanía, por supuesto, que lo va a entender», señaló el portavoz del PNV, Aitor Esteban.
La pelota y el informe reposan ahora en la mesa del Consejo de Ministros. Pedro Sánchez tomará una decisión escuchando los informes negativos de la Justicia, pero al no ser vinculantes la decisión sólo será suya. Alea jacta est.